El Gobierno polaco resucita la amenaza de tala del último bosque virgen de Europa
El área está protegida por la normativa ambiental de la Unión Europea y ha sido clasificado como Patrimonio Mundial por la Unesco e incluido en la Red Natura 2000
Bialoziewa es el último de los bosques vírgenes de Europa que en el pasado cubrían vastas porciones del continente. En él vive la población más numerosa de bisontes europeos, una especie milagrosamente recuperada cuando estaba al borde de la extinción, además de linces, lobos, nutrias y árboles centenarios. Este ecosistema forestal, el mejor conservado de la Gran Llanura europea y el último bosque primigenio caducifolio y mixto de tierras bajas de Europa, comprende extensas superficies intactas en las que los procesos naturales siguen su curso, y contiene abundante madera muerta que aporta una gran variedad de hongos e invertebrados saproxílicos, así como otras formas de vida asombrosamente diversas.
El bosque está protegido por la normativa ambiental de la Unión Europea y ha sido clasificado como Patrimonio Mundial por la Unesco e incluido en la Red Natura 2000 por la UE a fin de permitir que los procesos ecológicos tengan lugar sin injerencias.
A pesar de todo, Bialowieza sigue corriendo el peligro de ser talado, y el Gobierno polaco incumple una y otra vez su obligación legal de protegerlo.
En 2014, las autoridades polacas se comprometieron a no poner en marcha ninguna clase de "gestión forestal activa", permitiendo así que el bosque se desarrolle de manera natural. Esto significa también que no se autoriza la tala ni la extracción de madera. Sin embargo, en 2016 y 2017 estas promesas se incumplieron cuando el Gobierno polaco dio permiso para llevar a cabo actividades de tala a gran escala en el bosque. Solo en 2017, la extracción de madera comercial por parte de la sociedad State Forest alcanzó los 190.000 m3 y causó la destrucción de una gran superficie de este valiosísimo biotopo.
Los científicos y las organizaciones ecologistas se opusieron públicamente a la tala, y siete ONG (entre ellas WWF) presentaron una reclamación a la Comisión Europea basándose en que la deforestación de Bialowieza infringía la Directiva de Hábitats de la UE. En abril de 2018, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea emitió una sentencia firme por la cual confirmaba que era ilegal continuar con la tala en Bialowieza. A raíz del fallo, las actividades de tala y explotación cesaron.
A finales de 2018, la Unesco concluyó que las actividades de tala y gestión forestal activa llevadas a cabo en la parte polaca del bosque habían perturbado los procesos ecológicos y naturales, y advirtió de que el sitio podía ser incluido en la lista del Patrimonio Mundial en Peligro si el Gobierno polaco reemprendía cualquier actividad de tala o extracción de madera muerta, lo cual supondría perder la condición de Patrimonio Mundial.
Sin embargo, a pesar de la rotundidad de las pruebas y las recomendaciones científicas, de la oposición de la opinión pública y de las advertencias por parte de la comunidad internacional, incluidas la UE y la Unesco, el ansia del Gobierno polaco y State Forest de seguir talando y extrayendo madera del lugar parece intacta. El 24 de abril de 2019, el ministro polaco de Medio Ambiente, Henryk Kowalczyk, anunciaba nuevos planes de explotación forestal que prevén la tala de 43.000 m3 de madera del sitio Patrimonio Mundial de Bialowieza y de un volumen mucho mayor de la zona colchón en los próximos tres años. Unas operaciones a tamaña escala suponen un riesgo significativo para el bosque y la vida salvaje que alberga. Asimismo, podrían ser ilegales de acuerdo con la legislación polaca y europea, y ponen a Bialowieza en riesgo de perder su condición de lugar Patrimonio Mundial.
WWF Polonia, junto con otras ONG ecologistas y contando con apoyo científico así como de la opinión pública polaca e internacional, seguirá presionando a las autoridades polacas para que administren el bosque de manera apropiada (y legal) y aseguren su conservación a largo plazo para las generaciones futuras. Tenemos toda la información necesaria para revertir y mejorar la situación, incluidos amplios conocimientos y abundantes pruebas científicas, decisiones del comité del Patrimonio Mundial, una sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, así como recomendaciones de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y la Unesco. El Gobierno polaco debe tomarse en serio su responsabilidad específica de salvar el último bosque virgen de Europa siguiendo estas recomendaciones y poniéndolas en práctica en estrecha colaboración con todos las partes pertinentes.
Tomasz Pezold Knežević es especialista en conservación de la biodiversidad de WWF Polonia.
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