_
_
_
_
La experiencia personal
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

El cierre, el ERTE... y tratar de no perder la ilusión

“Aunque no te falten clientes, vives siempre al límite del negativo. Súmale el estado de alarma”, cuenta el dueño del salón Class peluqueros en Alcalá de Henares

Juan Sánchez Pardo, dueño del salón Class peluqueros en Alcalá de Henares.
Juan Sánchez Pardo, dueño del salón Class peluqueros en Alcalá de Henares.

Cuando en enero, comienzas a ver en los telediarios noticias sobre este maldito coronavirus en China, piensas que, verdaderamente, no te va a tocar. Vives ajeno a ello. Continuas llenando tu agenda, haciendo pruebas de novia para marzo, dando cita para los peinados de comunión en mayo. En febrero, continuas escéptico y animas a muchos de tus clientes con un próximo cambio de imagen de cara a primavera, que ya está cerca.

Esa misma semana, cuando el Gobierno central decreta el estado de alarma, pasas los días con miedo. El salón vacío. Cierras un día el salón teniendo que pagar el salario de cuatro trabajadores con una caja de 60 euros. Empiezas a desvelarte.

El viernes 13 tras el cierre del salón, llego a casa y se decreta estado de alarma. Veo con incredulidad que algunos negocios como peluquerías debemos permanecer abiertos. El sábado, tal cual me dicen, abro mi salón sin trabajadores, viene la policía y, tras una inexplicable reprimenda, bajamos el cierre. A partir de aquí, me confino abrumado por todas las nubes negras económicas que se avecinan.

Yo solo soy un peluquero, un pequeño empresario, que mantiene su negocio funcionando bien y dando de comer a algunas familias. Llevo 27 años, con negocio propio y, desde unos años a esta parte, mientras incrementan los bolsillos de algunos, menguan los de otros. Hace años, esto no pasaba. El incremento de la presión fiscal es inasumible para las peluquerías. Los políticos actuales, por los que ya no me siento representado, deberían tener la formación suficiente para hacer las cuentas y ver que no cuadran. Aunque no te falten clientes, vives siempre al límite del negativo. Pues bien, a esto, súmale el estado de alarma.

Haces un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) y mandas a los trabajadores al paro, con la incertidumbre de si van a cobrar; pides préstamos para pasar el bache de un mes y te endeudas más, sin saber si en el futuro lo podrás pagar. Y así, con esa angustia te despiertas todos los días a las dos de la madrugada. Aparte, gestiona los daños personales y familiares que esta situación añade.

Pues bien, a pesar de esto, no me rindo, continuo hacia delante. No sé si en la fórmula actual o reinventándome de alguna forma, saldré de ésta. Todos saldremos de ésta. No es momento de vivir solo de lamentaciones. Como dice la famosa canción Resistiré.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Juan Sánchez Pardo es dueño del salón Class peluqueros en Alcalá de Henares. Esta tribuna pertenece a la serie La Experiencia Personal, que EL PAÍS Madrid publica a diario durante la cuarentena por coronavirus. Puedes leer aquí la experiencia personal de Quique Villalobos (El poder de hacer barrio), Carlos González (Anestesia contra el miedo), Tábata Cerezo (La razón por la que estamos encerrados), Celia Blanco (Funeral Malasañero), Nacho Martínez (El cumpleaños de Charo se canta en el patio de luces), Esther Arroyo (“Liberar espacio: a mi abuela de 93 años la sacan de paliativos”), de Miguel del Arco (¿Cómo estar tranquilo cuando sabes que tienes una plantilla?), de Mariah Oliver (“Dos meses sin cobrar el sueldo”), de Victoria Torres (La tribu se pone en marcha), de Juan José Mateo (Ojo, que tiene 38º) o de la doctora María Sainz Martín (Ponerse al día).

Información sobre el coronavirus

- Aquí puede seguir la última hora sobre la evolución de la pandemia

- El mapa del coronavirus: así crecen los casos día a día y país por país

- Preguntas y respuestas sobre el coronavirus

- Guía de actuación ante la enfermedad

- En caso de tener síntomas, estos son los teléfonos que se han habilitado en cada comunidad

- Pincha aquí para suscribirte a la newsletter diaria sobre la pandemia

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_