PSOE y Junts iniciarán el sábado en Suiza una negociación marcada por la opacidad

El PSOE y Junts celebrarán el sábado, 2 de diciembre, en Ginebra (Suiza) su primera reunión desde la investidura de Pedro Sánchez con un verificador internacional, cuya identidad no quieren hacer pública ninguno de los dos. No es la única incógnita en unas negociaciones marcadas por la opacidad desde que los dos partidos firmaron en Bruselas el 9 de noviembre un acuerdo con el que los socialistas se aseguraron el respaldo de la derecha independentista a la reelección del presidente del Gobierno.

Ambas fuerzas ya discreparon el fin de semana, cuando fuentes del PSOE sostuvieron que la cita en la ciudad helvética no se produciría finalmente esta semana por motivos de agenda. Las advertencias de Junts fueron inmediatas: recalcaron que ya habían pactado que un primer encuentro debía tener lugar en noviembre. Es decir, a más tardar, el jueves 30. Una opción que se llegó a agendar y que finalmente se ha tenido que retrasar dos días en medio de un gran secretismo. Los partidos se escudan en la desconfianza mutua acumulada desde el procés para emitir la información mínima ante el temor de que el deshielo entre el principal partido del Gobierno y el partido de Carles Puigdemont sufra una nueva congelación.

Socialistas y postconvergentes no aclaran tampoco quién será la persona escogida para “verificar y realizar seguimiento de todo el proceso de negociación y de los acuerdos entre ambas formaciones a los que se llegue”, según suscribieron por escrito hace tres semanas. Otro aspecto que se oculta es si las conversaciones estarán reguladas por un organismo internacional especializado en mediación, si solo habrá un único encargado o serán varios los componentes del equipo del “mecanismo de acompañamiento, verificación y seguimiento” que arbitrará la relación. Una de las pocas certezas es que el procedimiento elegido ha sido consensuado por PSOE y Junts y que el contenido de las reuniones quedará recogido en actas. De este modo, quien se responsabilice de verificar la relación podrá pronunciarse, “desde su posición neutral” según las fuentes consultadas, sobre los posibles problemas en las negociaciones, quién y por qué los ha motivado y las soluciones aportadas.

La reunión ha sido confirmada el mismo día en que Felipe VI ha presidido en el Congreso la apertura solemne de la legislatura, en presencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. El encuentro en Suiza tendrá lugar tras una tormenta pasajera entre los dos firmantes, con advertencias de Junts al PSOE por si sus dirigentes tenían tentaciones de no cumplir el compromiso firmado.

El acuerdo entre el PSOE y Junts rubricado en Bruselas, que dio luz verde a la investidura de Sánchez, recoge que las dos formaciones celebrarán mensualmente una reunión negociadora con un verificador internacional, pero estaba pendiente de fijar la primera cita, que adelantó El Confidencial. Los negociadores han optado por reunirse en Ginebra por ser una ciudad “discreta”, que ya ha acogido anteriores reuniones entre los negociadores del PSOE y Junts. Optan por esta ciudad, ligada a la diplomacia y los pactos internacionales, porque mantener los encuentros en Bruselas dificulta la reserva, dada la gran afluencia y efervescencia en la capital comunitaria de periodistas y políticos. De hecho, tenía que celebrarse necesariamente fuera de España, ya que Carles Puigdemont es un huido de la justicia y sería detenido si entra en España. Otro interrogante por conocer es el lugar exacto y la hora de la cita.

Fuentes socialistas apuntaron a que la idea es mantener la misma estrategia que en la negociación y no dar pistas de cómo avanzan los contactos porque, justamente ahí, dicen las fuentes, se puede negociar con más eficacia.

El pacto dejaba sentado que la figura del verificador internacional se creaba para superar “las desconfianzas mutuas” entre los de Sánchez y los de Puigdemont, y que tenía como papel el de “acompañar, verificar y realizar seguimiento de todo el proceso de negociación y de los acuerdos entre ambas formaciones a los que se llegue”.

El acuerdo contempla que en esta primera reunión los de Puigdemont plantearán un referéndum de autodeterminación para Cataluña y una modificación de la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA) que permita a la Generalitat recaudar todos los impuestos. Por el contrario, el PSOE rechazará el referéndum y apostará por desarrollar o reforma el Estatut vigente y una reforma de la financiación autonómica, pero en ningún caso la cesión del 100% de los tributos a Cataluña. Junts ha designado como negociadores al expresident Carles Puigdemont, al secretario general Jordi Turull y a su líder parlamentaria Miriam Nogueras. Por la parte socialista solo está claro Santos Cerdán, el secretario de Organización. “Hemos cuadrado las agendas, es una reunión de trabajo, nada más. Anunciamos cuando hicimos el acuerdo que iba a haber reuniones de este tipo, no es la primera ni va a ser la última. No hay que darle más importancia”, ha afirmado el número tres del PSOE tras el acto solemne de apertura de la XV Legislatura en el Congreso.

El mero retraso de la reunión puso en guardia a Junts, que el lunes hizo una advertencia a los socialistas para que no dejasen pasar el tiempo. “Sabe que cualquier cosa que quiera hacer tendrá que llevarla al Congreso y necesitará los votos de Junts. Y como es consciente de eso, estoy segura de que hará todo lo posible para que no descarrilen los votos”, afirmó la presidenta de los antiguos convergentes y condenada por trocear contratos, Laura Borrás, en el programa Aquí Catalunya, de la Cadena SER.

El senador socialista y expresidente de la Generalitat Valenciana Ximo Puig ha asegurado este miércoles que el PSOE cumplirá los acuerdos de investidura con los partidos independentistas y ha pedido a Junts que tenga paciencia, esgrimiendo que la legislatura solo acaba de arrancar. Preguntado sobre la reunión que PSOE y Junts celebrarán en Ginebra, Puig ha resaltado que le parece “bien” que haya “todas las reuniones” para el diálogo, “donde sea y como sea”.

Desmentido del Gobierno suizo

Por otra parte, el Gobierno suizo ha desmentido de manera tajante la mañana de este miércoles, a través de la agencia Efe, haber proporcionado ayuda en secreto al expresidente catalán Carles Puigdemont o a personas vinculadas al movimiento Tsunami Democràtic, tras las acusaciones aparecidas en este sentido en la prensa española. “Suiza desmiente haber ayudado secretamente al señor Puigdemont o a cualquier otra persona en una ‘ofensiva contra España’, de acuerdo a la expresión utilizada” en un medio de prensa, indica en una declaración remitida a la agencia por el Ministerio suizo de Asuntos Exteriores. La entidad oficial también indica que ha tomado nota de las informaciones sobre una eventual reunión en Ginebra relacionada con la situación política en España, así como sobre la nominación de un grupo de verificadores internacionales que participarían en esas discusiones. “Suiza no está involucrada en esas discusiones y, por lo tanto, no tiene comentarios que hacer al respecto”, aclara. Asimismo, reitera por escrito su posición, según la cual “la cuestión de la independencia de Cataluña es un asunto de política interior de España y debe ser tratada en el marco del orden constitucional español”.