Corazón roto


Las grietas del asfalto nos traen a la memoria las gráficas de la fiebre corporal, de la fiebre bursátil, de la fiebre climática, no sé, hay fiebre en todas partes. El mismísimo termómetro quema antes de que nos lo metamos por el culo. En este caso, las produjo, en Japón, un movimiento de tierras formidable. Vemos a la gente fuera de las viviendas, por si se ocasionara otra sacudida y la gráfica se extendiera a los cimientos y los edificios colapsaran. Hay jóvenes sentados sobre las grietas que nos recuerdan un poco (y por añadirle poesía al asunto) a las notas musicales colgadas de los pentagramas. He aquí, pues, un resumen de todo: de la evolución del dinero, del calentamiento global y del consuelo de la música. Eso es la vida, ¿no? Una rara y desequilibrada combinación de economía, de enfermedad y cultura.
Los japoneses construyen edificios que se cimbrean como el junco cuando sus raíces se agitan. Digamos que son edificios encajadores, flexibles, edificios con cintura, capaces de recibir el impacto y de obligarlo a desplazarse. Después de observar atentamente esta foto, al acostarme, imaginé que la grieta recorría el planeta, atravesaba el fondo de los mares como los cables telefónicos, llegaba a mi ciudad y se prolongaba secretamente por las calles hasta llegar a mi casa y colarse debajo de mi cama. Tuve la impresión de que el mundo, en su totalidad, estaba agrietado y de que lo que veía al consultar la evolución de mi fiebre, de la temperatura global o del Ibex 35 no eran representaciones gráficas, sino auténticas fisuras abiertas en el corazón de todos los sistemas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma

Más información
Archivado En
Últimas noticias
Estados Unidos sanciona a familiares de Cilia Flores, esposa de Maduro
La Administración de Trump publica solo una parte de los papeles de Epstein pese a que la ley le exigía difundir “todos” los archivos
La Corte Interamericana condena a México por no prevenir ni investigar el feminicidio de Lilia Alejandra García Andrade hace 25 años
García Luna apela en Estados Unidos la sentencia de 38 años por colaborar con el Cartel de Sinaloa
Lo más visto
- El Supremo condena a ‘Okdiario’ y a Eduardo Inda por intromisión en el honor de Iglesias al acusarle de cobrar de Venezuela
- Los pagos del Gobierno de Ayuso a Quirón engordan con facturas de hace una década y sin pagar desde tiempos de Cifuentes
- Más de 40 congresistas demócratas piden por carta a Trump que cese en sus “intentos de socavar la democracia en Brasil”
- La princesa Leonor realiza su primer vuelo en solitario como parte de su formación en el Ejército del Aire
- La policía registra varios domicilios y las oficinas de la ministra francesa Rachida Dati por otro presunto caso de corrupción






























































