Un blanco fresco y cálido

A Paco Rodero y su mujer, Conchita Villa, no les basta con haber creado una de las mejores bodegas de Ribera de Duero, la prestigiosa Pago de los Capellanes, sino que están empeñados en conseguir un gran blanco a la altura de sus soberbios tintos. Obviando lo más sencillo, la cercana Rueda o el Bierzo, optaron por Valdeorras, donde la uva godello tiene uno de sus mejores hábitats. Allí, tras recorrer distintos pueblos y visitar numerosas fincas, han conseguido adquirir 12 hectáreas de excelente viñedo con el que cimentar su bodega, fundada hace cinco años en el pueblo de Seadur (Ourense).

Para O Luar do Sil 2016 han seleccionado las mejores viñas de dos parcelas situadas en la parte alta del Valle del Sil, en los codos de Larouco, sobre suelos graníticos. Viticultura heroica de Valdeorras que permite obtener blancos de notable frescura y buena capacidad de envejecimiento. Se trata de un vino fermentado en acero inoxidable con la oportuna crianza sobre lías, hoy en boga. Sin embargo, O Luar do Sil sortea lo habitual, ofreciendo una limpia impronta varietal, cuya melodía aromática armoniza con elegancia registros frescos y cálidos, frutales y herbáceos, florales y de pastelería. En boca es complejo y equilibrado, con un volumen, y sensación gustativa amplia, suave, evocadora.