_
_
_
_

El activista que puede obligar a los gobernantes a rendir cuentas en Gabón

Boursier Tchibinda recorre los pueblos de su país cuaderno en mano para fomentar la incorporación de sus habitantes a su proyecto digital revolucionario sobre participación ciudadana

El presidente de Gabón, Ali Bongo. La familia Bongo gobierna el país africano desde hace ya medio siglo.
El presidente de Gabón, Ali Bongo. La familia Bongo gobierna el país africano desde hace ya medio siglo.France Press
Carlos Bajo Erro
Más información
Un ojo digital en las urnas de Mozambique
Africtivistes: compromiso a las duras y a las maduras
Así se combaten las ‘fake news’ en algunos países africanos, que también las sufren

Boursier Tchibinda se define a sí mismo como “un ciudadano de los tiempos modernos”. Este periodista y bloguero de Gabón se ha convertido en uno de los referentes de la promoción de la ciudadanía digital en África Central, para trasferir a las personas el protagonismo de las decisiones políticas. Ahora Tchibinda ha vuelto al terreno, a recorrer caminos y pueblos cuaderno en mano para empezar por la sensibilización de las comunidades.

Hace más de dos años, este joven gabonés concibió 241Citoyen, un proyecto para “darle la vuelta al sistema de control de la gestión de las colectividades locales y controlar, por ejemplo, a dónde van los impuestos de los ciudadanos”. Tchibinda la imaginó como una plataforma digital que pretendía “implicar a las poblaciones locales en la definición de los proyectos comunitarios: fuentes públicas, de paradas de autobús, de electricidad... La propuesta se carga en la plataforma y los usuarios votan esas propuestas on line”. La idea recibió el apoyo de varias organizaciones internacionales como CFI (la agencia francesa de desarrollo para medios).

Ahora están acercándose a la realidad de los pueblos: “La actividad digital ha quedado en una página Facebook en la que colgamos las informaciones. Los esfuerzos los hemos dirigido a reencontrarnos con la población sobre el terreno y explicar la dimensión social del proyecto. La tasa de cobertura móvil es buena y mucha gente tiene acceso a Internet, pero la realidad es que su uso todavía es limitado”, comenta Tchibinda.

Tchibinda argumenta su convicción sobre la necesidad de ese trabajo en las pequeñas ciudades alejadas y en los pueblos. “En Libreville, la capital, tienes acceso a todos los servicios de base sin problema. Pero a medida que te alejas hay lugares en los que puedes tener problemas para encontrar un médico, un dispensario, un hospital equipado; hay escuelas en las que algunos profesores se han marchado...”.

Boursier Tchibinda, en una de sus charlas en un pueblo de Gabón.
Boursier Tchibinda, en una de sus charlas en un pueblo de Gabón.

Desde hace más de dos años, el proyecto 241Citoyen va al encuentro de las comunidades locales. Boursier Tchibinda identifica los problemas y los transmite a los cargos locales, en lo que él llama las “consultas ciudadanas”. Confiesa que se ha encontrado con obstáculos, pero también avances: “Hemos organizado por primera vez la Jornada del OpenData en Gabón, para poner las bases de la apertura de los datos”.  No siempre hay conciencia de transparencia y rendición de cuentas del destino del dinero público: “Tenemos que empezar por la educación en el uso de las TIC a esos representantes públicos. Después vendrán los principios de rendición de cuentas de la gestión que les ha sido confiada”.

El proyecto se desarrolla en un contexto complejo, el de un país con buenos datos macroeconómicos, por la explotación del petróleo, el oro o el manganeso; pero con una distribución desigual de la riqueza. “De forma creativa, los raperos decían país rico, pueblo pobre. Tenemos muchos recursos pero no generamos riqueza. La creación de valor no es sólo económica, sino artística, social, periodística... ”, lamenta Tchibinda. El contexto político no es más sencillo. Los Bongo gobiernan Gabón desde hace más de medio siglo, primero Omar Bongo, durante más de cuatro décadas. A su muerte, en 2009, se celebraron unas elecciones que ganó su hijo, Ali Bongo, presidente hasta la actualidad. “Durante mucho tiempo”, explica el impulsor del proyecto de participación, “en Gabón los movimientos estaban ligados a los partidos políticos y eran muy personalistas. Pero estamos en un momento de cambio".

De forma creativa, los raperos decían país rico, pueblo pobre. Tenemos muchos recursos pero no generamos riqueza. La creación de valor no es sólo económica, sino artística, social, periodística...

Tchibinda explica en este clima de tensión: “Hay pocos movimientos sociales porque se identifican con la oposición y la revuelta”. Se trata de un entorno complicado para fomentar un proyecto que invita a los ciudadanos a tomar protagonismo en la vida política y que estrecha el margen de los políticos: “Gabón es un país con unos mínimos democráticos pero tiene necesidad de reafirmarse, redesarrollarse y del que la ciudadanía tiene que reapropiarse”.

“Un proyecto como este”, sentencia Tchibinda, “en un país en el que los indicadores democráticos están en rojo es una amenaza. Es una amenaza decir a las autoridades locales que rindan cuentas sobre el presupuesto, que los ciudadanos hagan presión sobre propuestas de desarrollo local consensuadas y constatadas. Hay que explicar bien todo lo que rodea el proyecto porque las autoridades intentarán controlarlo”.

Puedes seguir a PLANETA FUTURO en Twitter y Facebook e Instagram, y suscribirte aquí a nuestra newsletter.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Carlos Bajo Erro
Licenciado en Periodismo (UN), máster en Culturas y Desarrollo en África (URV) y realizando un doctorando en Comunicación y Relaciones Internacionales (URLl). Se dedica al periodismo, a la investigación social, a la docencia y a la consultoría en comunicación para organizaciones sociales.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_