Gotas de alegría
TRAS CASI DOS décadas sin lanzar un perfume femenino al mercado, Christian Dior confía a su nariz François Demachy la creación de Joy (alegría en inglés). Con la joven actriz Jennifer Lawrence como imagen internacional, esta fragancia sigue las directrices de la nueva era de la maison, sin renunciar al mandato de feminidad, lujo y placer que su creador instauró en 1947. Sus notas olfativas incluyen cáscara de bergamota y mandarina, esencia de rosa y jazmín. La madera de sándalo y los almizcles evanescentes ponen en relieve un aroma con multitud de matices. “Este perfume se parece a ciertos cuadros puntillistas, con una enorme técnica detrás, pero que no resultan pesados”, destaca Demachy. Este elixir rosa ha sido creado entre París y Grasse, la región francesa donde el famoso modista se refugiaba del bullicio de la capital, y su precio es de 135 euros (90 mililitros). De líneas simples y juveniles y con un tapón joya envuelto por un hilo plateado, su frasco se aleja del clásico glamour de J’adore, el perfume icono de la firma.
