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Mil millas por los niños de África

La Fundación Doctor Clavel impulsa un proyecto de microdonaciones para luchar contra la hidrocefalia

Mil millas (1609,34 kilómetros) separan el puerto de Barcelona del de Sevilla, cinco días de viaje si se recorren en moto de agua. BrainXperience es el nombre de esta travesía que van a completar, a partir de hoy (lunes 30 de mayo), los deportistas Joaquín Inglada Alonso y Juan Félix Bravo Aguilar. Navegarán una media de 400 kilómetros diarios por una causa solidaria: la gesta pretende recaudar fondos para apoyar a la Fundación Doctor Clavel a combatir la hidrocefalia que afecta a miles de niños en países subdesarrollados.

Joaquín Inglada, que sufrió un accidente de tráfico en el que perdió parte de la pierna izquierda hace 25 años, ha creado un proyecto en la plataforma de crowdfunding solidario Migranodearena.org, donde particulares y empresas pueden colaborar con microdonaciones, que también pueden realizarse a través de la web de la fundación. Inglada quedó campeón en la modalidad offshore de la primera Prueba del Campeonato de Aragón de Motonáutica en Comarruga, y ha sido el único piloto con discapacidad en los campeonatos de España, Cataluña y Aragón. Le acompañará en este trayecto el campeón del mundo y record Guinness de motonáutica, Juan Félix Bravo Aguilar.

Una enfermedad fácilmente curable

La hidrocefalia es la acumulación de líquido dentro de la cabeza al nacer. "Conduce a macrocefalia, retraso mental y, eventualmente, muerte prematura", explican desde la fundación. Los precarios controles prenatales y la deficiente atención obstétrica en el parto son las principales causas de esta enfermedad en África, sin embargo, es "fácilmente tratable gracias a una cirugía sencilla de derivación del líquido mediante un tubo que se coloca desde la cabeza hasta el abdomen", añaden.

La Fundación Doctor Clavel enviará un equipo de médicos a Zanzíbar y Etiopía para dar tratamiento quirúrgico y formar a médicos locales en el diagnóstico precoz y en la neurocirugía. Estos menores tienen dificultad para ser atendidos debido a las largas distancias, malas comunicaciones entre los pueblos y la escasez de centros que cuentan con médicos neurocirujanos. "Mientras que en España hay un especialista por cada 100.000 habitantes, en los países del este, centro y sur de África hay tan solo 34 que tienen que cubrir las necesidades de 210 millones de personas", afirman.

La fundación nació con el objetivo prestar la mejor atención sanitaria, valoración médica y tratamiento a personas que, debido a su extrema situación de pobreza o al lugar donde han nacido, no pueden acceder a un tratamiento que cure su patología cerebral o de columna.

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