El alcalde de Parla justifica un ERE "difícil" y sostiene que era "inevitable"

El alcalde de Parla, José María Fraile (PSOE), ha comparecido esta mañana para tratar de explicar la decisión tomada ayer de prescindir de 110 trabajadores de la plantilla municipal. El regidor ha asegurado que las negociaciones con su socio de gobierno (IU) y los sindicatos estaban "agotadas" por lo que "había que tomar decisiones ya, no se podían postergar". La medida es, a su juicio, "difícil" pero "inevitable".

Fraile ha ofrecido la rueda de prensa no en el consistorio sino en la Escuela de Música y Danza Isaac Albéniz a las 9.15, mientras un cuarto de hora después se concentraban los trabajadores municipales a las puertas del Ayuntamiento. El regidor ha considerado la medida "un ejercicio de responsabilidad" aprobar este expediente y otras medidas que se traducirán en "unos 100 trabajadores menos (110 en concreto) a fecha de 31 de diciembre y un ahorro de cuatro millones" -el 12% del presupuesto para salarios-. Los recortes, sobre una plantilla total de 730 trabajadores, se desglosan en 66 funcionarios que serán despedidos en un ERE o prejubilados y otros 44 son servicios que se externalizan o contratos subvencionados que no se van a renovarse. Con todo, los 66 funcionarios despedidos son 124 menos que los 190 anunciados inicialmente.

El alcalde no teme la reacción de IU, que advirtió de que el pacto de Gobierno correría "grave peligro" si se acometían despidos, aunque no ha querido pronunciarse. "Estamos en un momento en el que hay que ser responsables. Somos dos fuerzas políticas maduras que confluimos en un acuerdo y que creo que pensamos en el largo plazo", ha argumentado. El coordinador general de IU en la Comunidad, Gregorio Gordo, manifestó ayer que los despidos conllevan "una incompatibilidad" de cualquier acuerdo con su formación política. Al respecto, el secretario del PSM, Tomás Gómez, se ha mostrado hoy "convencido" de que las relaciones de su partido con IU sigan por el mismo "buen camino" que, asegura, van en la actualidad. Gómez ha expresado su apoyo "político y personal" a su sucesor en Parla.

Sobre la propuesta realizada el lunes por el delegado de Recursos Humanos, José María Díaz Castañeda, de una rebaja de los salarios de la plantilla municipal de un 7%, Fraile ha transmitido que "los representantes de los trabajadores no dieron una respuesta clara y contundente". ¿Qué le parece que su concejal de Formación y Empleo, la socialista Beatriz Arceredillo, votara ayer en contra del ERE? "Hoy ser alcalde o concejal no es fácil. Son situaciones complicadas. Y ayer propuse a los compañeros de la Junta de Gobierno un voto nominativo. El mejor ejercicio para la democracia es que cada uno vote lo que considere en conciencia", ha manifestado el regidor.

La situación económica de la localidad madrileña, de 130.000 habitantes, es crítica. El PSOE cifra la deuda en 50 millones y el PP la eleva a 200, aunque el alcalde prefiere esperar a los resultados de una auditoría interna para dar una cifra. Un juez acaba de embargar el patrimonio del Ayuntamiento por una deuda de cuatro millones, a lo que se suma la deuda de 80 millones contraída con la anterior empresa de limpieza y los 20 millones que debe del tranvía.

Desde el PP de Madrid, su secretario general, Francisco Granados, ha indicado que IU "tiene la llave" para frenar los despidos por su condición de socio de Gobierno, al tiempo que la ha hecho responsable de estos "por acción u omisión" si finalmente se producen. Granados ha vuelto a aprovechar la situación de Parla para criticar al líder socialista: "Ayer asistimos a un nuevo acto de esta serie teatral" cuyo "actor principal que ha sido Tomás Gómez", que ha "quebrado el Ayuntamiento con una gestión desastrosa, manirrota y despilfarradora que le ha dejado en situación de quiebra técnica". Para CC OO, estos despidos son en realidad "un acto absolutamente irresponsable" y suponen "desmantelar los servicios públicos, especialmente los servicios sociales que son los más afectados". El sindicato opina, además, que hay un error de procedimiento que puede paralizar los despidos. "Es un despido colectivo, lo que supone una modificación de plantilla y el diseño de plantilla sólo lo puede hacer en exclusiva el Pleno. Este acuerdo no sería válido y vamos a pedir a un juez que paralice la medida", sostiene CC OO.