Ola de cambio en el mundo árabe
| Revolución democrática en Egipto
Hosni Mubarak desafió anoche a Egipto. Cuando parecía inminente su dimisión, cuando incluso el primer ministro había reconocido la victoria de los manifestantes, Mubarak compareció en televisión para reafirmar su continuidad.
Antes de conocerse la noticia de que el Ejército respaldaba las propuestas de los manifestantes, la oposición había dado el paso de reunirse con todos los movimientos juveniles y aunar esfuerzos para presionar al régimen y pedir el fin de la era Mubarak.
Los manifestantes que desde hace 17 días gritan contra Hosni Mubarak han despertado a millones de trabajadores egipcios, cuyos salarios irrisorios les hunden cada año más en la miseria. La declaración de huelga de los 600 obreros de una empresa de mantenimiento del canal de Suez desató todas las alarmas el martes.
El discurso de Hosni Mubarak desconcertó a una oposición que esperaba un desenlace distinto. Desde su cuenta de Twitter, Mohamed el Baradei fue contundente: "Egipto va a explotar.
Ilusión, incertidumbre, sonrisas, lágrimas. Cualquier emoción era válida ayer cuando el rumor de que el Ejército respaldaba las peticiones de los ciudadanos corrió de boca en boca. Los más afortunados vieron en los cafés aledaños, entre el borboteo de la shisha (pipas de agua) y el calor del té, cómo se transmitía la noticia.
La diplomacia
La Casa Blanca advirtió anoche claramente que lo ofrecido por Hosni Mubarak no es suficiente para satisfacer las reclamaciones del pueblo egipcio y pidió al Gobierno de ese país "creíbles, concretas e inequívocas medidas hacia una auténtica democracia", medidas que, en opinión de Washington, "no han sido tomadas todavía".
Repercusiones en Oriente Próximo
Un cambio de la envergadura del que se avecina en Egipto supone un vuelco de la ecuación política en la región de consecuencias impredecibles. Por eso, cuando la noticia de que Hosni Mubarak finalmente diría adiós comenzó a correr como la pólvora a media tarde de ayer por las cancillerías de Oriente Próximo, el silencio y la cautela se impusieron.
Á. ESPINOSA
¿Puede el jefe de los espías de Mubarak significar un cambio de régimen? Omar Suleimán (Quena, 1935) siempre fue un confidente del Faraón. Ya era el segundo hombre más poderoso de Egipto antes de que la revuelta le llevara a la vicepresidencia. Desde el principio, su nombramiento se vio como una forma de asegurar la continuidad.
El debate de los intelectuales
IGNACIO CEMBRERO | Madrid
Seis escritores árabes se pronuncian en EL PAÍS sobre las sublevaciones de los pueblos de Túnez y Egipto - Prevén que se extenderán por toda la región
JESÚS A. NÚÑEZ VILLAVERDE
Reacciones en Europa
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, se refirió anoche en un programa en directo en la televisión a la explosiva situación de Egipto. Al enterarse del discurso del presidente Hosni Mubarak, Sarkozy aseguró: "Es inevitable que Egipto cambie y que se instale en la democracia.
Vestido con uniforme escolar y sin llamar la atención, un niño de 12 años perpetró ayer una matanza en un centro de reclutamiento del Ejército paquistaní en la ciudad de Mardán, en el noroeste del país. El atentado suicida fue reivindicado por los talibanes.