Una toxina hace que la Generalitat prohíba extraer marisco en el Ebro

El Departamento de Agricultura cerró ayer la bahía del Fangar y el golfo de l'Ampolla (Baix Ebre) como consecuencia de que unos análisis en el marisco hayan dado positivo en DTS, una toxina diarreica que los mariscos pueden almacenar y, si no se detiene su distribución, puede afectar al consumidor. La Generalitat aseguró ayer, a través de un comunicado, que el programa de vigilancia de la calidad del marisco es "permanente" y que no existe ningún riesgo para los consumidores con el marisco que actualmente está a la venta en cualquier mercado.

Ante el positivo del análisis, el Gobierno catalán ha prohibido temporalmente la extracción de marisco en estas zonas del delta del Ebro, donde habitualmente faenan las cofradías de Sant Carles de la Ràpita y Deltebre (Monstià) y L'Ametlla de Mar y L'Ampolla (Baix Ebre). Las cofradías recibieron el aviso ayer mismo, minutos después de que la Generalitat conociera los resultados de los análisis.

El ejecutivo ha informado a las cofradías de pescadores de Sant Carles de la Ràpita, Deltebre, L'Ampolla y L'Ametlla de Mar y a las Capitanías y autoridades portuarias, a la Dirección General de Salud Pública, a la Agencia Catalana del Agua y a los centros de expedición y depuración de moluscos.