PÍLDORAS
Litiasis renal
La litiasis renal, formación de cálculos en el riñón, afecta al 5% de los españoles, y casi la mitad de los que los padecen vuelven a desarrollarlos antes de los cinco años. El abandono de la dieta mediterránea, el sedentarismo y la escasa ingesta de líquidos contribuyen al aumento de este trastorno, que es más frecuente en hombres de mediana edad. En las mujeres esta dolencia se produce en la mayoría de los casos por infecciones en la orina, y en los ancianos, por el aumento de los niveles del ácido úrico y ciertas alteraciones metabólicas. Una de las intervenciones más frecuentes, cuando los cálculos no se eliminan por la orina, es la litotricia extracorpórea, utilización de ondas de choque que rompen las piedras en trozos más pequeños. Ahora se dispone de nuevas técnicas, como la litotricia intracorpórea, eliminación de piedras por cirugía endoscópica instrumental, y el láser Holmium. Según Juan Antonio López, coordinador del grupo de Litiasis de la Asociación Española de Urología, con estos tratamientos se obtiene una mayor precisión y se reduce el daño que se pueda generar en los tejidos de alrededor.- C. G.
Pescado y cáncer renal
El consumo elevado de pescado graso entre las mujeres está vinculado con un menor riesgo de carcinoma de células renales, una forma común de cáncer de riñón, según los resultados preliminares de un estudio del Instituto Karolinska en Estocolmo (Suecia) que se ha publicado recientemente en el Journal of the American Medical Association (JAMA). El carcinoma de células renales, que afecta al tejido funcional del riñón, da lugar a más del 80% de los casos de cáncer renal. Según los autores, las mujeres que consumieron una o más porciones de pescado graso a la semana tenían hasta un 44% menos de riesgo de cáncer renal en comparación con las mujeres que no consumían nada de pescado. En el estudio participaron un total de 61.433 mujeres, con edades de entre 40 y 76 años, que no tenían diagnóstico previo de cáncer en el momento en el que fueron incluidas en la investigación. El seguimiento medio del conjunto de las mujeres fue de más de 15 años.
