El juez decide investigar los casos de 15 enfermos sedados en Leganés

Rafael Rosel, el juez que instruye el caso de las sedaciones del hospital de Leganés (Madrid), dictó ayer un auto en el que va más allá de las consideraciones del fiscal y ordena al director de este centro hospitalario que, en el plazo de 10 días, le facilite los "datos profesionales y personales" de los médicos que aplicaron sedaciones a 15 pacientes terminales. La intención del juez es citarles como imputados.

Los 15 casos que el juez ha decidido investigar son los cuatro en los que los peritos del Colegio de Médicos de Madrid certificaron que la sedación aplicada a esos enfermos era "contraindicada" y de los otros once en los que se apreciaron que "las dosis reales utilizadas [en la sedaciones] fueron muy elevadas".

El juez Rosel, del Juzgado de Instrucción 7 de Leganés, ha ordenado, además, deducir testimonio en relación con un nuevo escrito que le presentó la Asociación de Víctimas de Negligencias Sanitarias (Avinesa). En él se da cuenta de supuestas sedaciones irregulares en Leganés anteriores a las que ahora se investigan. Deducir testimonio significa que el juez envía ese escrito a reparto entre sus colegas para que, al juez que le toque la causa, investigue si hay delito en ella. En el auto dictado ayer el juez rechaza la petición de Avinesa para que imponga fianza los médicos que intervinieron en las 15 sedaciones que ha decidido investigar. El juez entiende que es prematuro fijar fianzas hasta que no se tome declaración a los médicos y el hospital facilite sus nombres.

La decisión del juez de imputar a los médicos que trataron los citados 15 casos va más allá de lo que pedía la Fiscalía de Madrid. Los fiscales entienden que sólo cabe investigar cuatro casos se sedaciones supuestamente irregulares; en concreto, aquellas en las que los médicos habrían aplicado, según los peritos del Colegio de Médicos de Madrid, "una sedación contraindicada".

Reacciones políticas

El caso de las sedaciones de Leganés se inició con una denuncia de Avinesa presentada en la fiscalía de Madrid en la que se indicaban que se habían cometido unos 400 homicidios en este hospital por sedaciones indebidas o contraindicadas. El consejero de Sanidad de Madrid, Manuel Lamela, asumió la denuncia y la llevó a la fiscalía. Cuando vio que la fiscalía de Madrid sólo había decidido investigar 12 casos, interpuso una denuncia en el juzgado y arrebató la investigación a la fiscalía. Sobre esos 12 casos se pronunciaron entonces los peritos de la Clínica Médico Forense de Madrid. Éstos emitieron un informe exculpando a los médicos del hospital.

El portavoz adjunto del PP en la Asamblea de Madrid, Juan José Güemes, explicó ayer que las denuncias que han desembocado en la imputación de médicos del Severo Ochoa por 15 sedaciones supuestamente irregulares "no proceden ni de la Consejería de Sanidad ni de la Comunidad, sino de asociaciones de pacientes". Güemes respondió así a la portavoz adjunta del PSOE de Madrid, Ruth Porta, que ha manifestado que el juzgado que instruye el caso de las sedaciones de Leganés terminará "archivándolo" porque no hay delito.