Evo Morales repartirá 2,5 millones de hectáreas entre indígenas bolivianos
El presidente anuncia la "revolución agraria" en plena campaña para las legislativas
El presidente de Bolivia, Evo Morales, ha proclamado el arranque de la "revolución agraria" con la distribución de 2,5 millones de hectáreas de tierras estatales entre campesinos indígenas. Morales hizo el anuncio el sábado (madrugada del domingo en España) en un multitudinario acto en la ciudad de Santa Cruz, en el que se corearon consignas a favor del oficialista Movimiento al Socialismo. La oposición y las organizaciones agrícolas y ganaderas han tachado la medida de electoralista. El anuncio se produce en plena campaña para los comicios legislativos del 2 de julio.
En el acto de Santa Cruz, en el que participaron representantes de la mayor parte de las etnias asentadas en Bolivia, Morales dispuso la inmediata distribución de más de dos millones de hectáreas de tierras del Estado entre los que no poseen tierras o las tienen en cantidad insuficiente, y entregó además títulos de propiedad a comunidades indígenas para 3,1 millones de hectáreas.
Estas medidas forman parte del primero de los siete decretos sobre la tierra promulgados el sábado en el departamento oriental de Santa Cruz, el primer productor agrícola y el segundo ganadero del país, y cuna de una vigorosa oposición a las políticas estatistas del Gobierno.
El segundo decreto abroga la propiedad forestal y anula las concesiones de explotación de bosques. Los otros decretos son de orden administrativo, y están destinados, entre otros aspectos, a reforzar el centralismo del Instituto Nacional de Reforma Agraria. Evo Morales advirtió de que el siguiente paso será "revertir al Estado las tierras ociosas, improductivas".
El anuncio se produjo un día después de que fracasaran las negociaciones con las principales organizaciones empresariales agrícolas y ganaderas de siete departamentos del país.
La Cámara Agropecuaria del Oriente, que agrupa a los agroindustriales y ganaderos de las regiones de Santa Cruz, Beni y Pando, anunció que el lunes evaluará el alcance de los decretos y la posibilidad de interponer recursos de amparo ante el Tribunal Constitucional. Las medidas, añadió, responden a intereses del Gobierno, y no al diseño de un programa agrícola consensuado.
También la oposición se ha pronunciado en el mismo sentido. En puertas están las elecciones para la Asamblea Constituyente, en la que Morales aspira a obtener dos tercios de los escaños para "refundar" Bolivia, siguiendo el modelo venezolano.
Evitar el minifundio
En el acto de Santa Cruz, el presidente aseguró que la Asamblea permitirá "terminar con los discriminadores, con los que saquearon y explotaron Bolivia, acabar con esa llamada justicia que lo único que hace es injusticia con los pobres y con los pueblos de Bolivia".
Morales señaló que el objetivo es evitar el minifundio, en el que acabó la revolución agraria de 1952 en las tierras del altiplano que fueron divididas hasta el surco en la herencia de padres a hijos, y prometió que abrirá mercados para productos agrícolas ecológicos y orgánicos.
"Los indios estamos aquí, en el bastión de la oligarquía, para defender la tierra como dueños que somos", dijo el indígena Pedro Nuni, mientras que el aymara Isaac Dávalos, de la Confederación Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia, llamó a lograr "el cien por cien" de los escaños de la Asamblea Constituyente. "Tenemos que ganar a la oligarquía todos los representantes para dejarles sin constituyentes y así respaldar los decretos de Evo Morales", declaró, ante el aplauso general. "Ellos [los terratenientes] se hacen las víctimas porque les estamos quitando las tierras", afirmó el indígena moxeño Mario Guaji, al convocar a los indígenas a unificar el voto por el oficialista Movimiento al Socialismo (MAS).
Entretanto, las combativas organizaciones ciudadanas de los departamentos orientales -los más extensos y con menor densidad demográfica en la cabecera amazónica- mantienen la convicción de que los comités de autodefensa serán la solución para mantener las tierras que heredaron de sus abuelos bajo su control.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.