Agricultura encerrará las aves en cuanto haya peligro

Evitar que las aves permanezcan al aire libre. Ésa es la principal recomendación del Ministerio de Agricultura para lograr que el virus de la gripe aviar no llegue a las explotaciones avícolas española, sobre todo en aquellas áreas consideradas de riesgo como las zonas cercanas a los humedales y ríos o donde exista una elevada densidad de aves migratorias.

El Ministerio insiste en la necesidad alimentar y abrevar a las aves en el interior de naves o lugares protegidos para desalentar la posible llegada de aves silvestres y cercar las salidas para que los animales no puedan escapar y acceder a los arroyos, ríos o entornos naturales cercanos, donde exista una alta concentración de aves migratorias.

En determinadas zonas, el Ministerio prohibirá el mantenimiento de las aves de corral al aire libre para evitar el contacto de éstas con aves acuáticas. Éstos lugares han sido incluidos en una lista elaborada por las Comunidades Autónomas, en colaboración con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación que recoge 6 zonas de riesgo: Andalucía, especialmente la zona del Parque de Doñana; la Albufera de Valencia y las Salinas de Santa Pola en la Comunidad Autónoma de Valencia; la reserva Natural de las Marismas de Santoña y Noja, en Cantabria, las Salinas de San Pedro del Pinatar, en Murcia; y las zonas del Delta del Ebro y Delta del Llobregat, en Cataluña.

Aislamiento preventivo

El Gobierno señala que en estas zonas no se debe dar de beber a las aves agua procedente de depósitos de superficie a los que puedan acceder las aves silvestres, salvo en caso de que el agua sea tratada a fin de garantizar la inactivación de posibles virus. Otras de las medidas propuestas es el aislamiento preventivo de las aves de nueva introducción en zonas de aislamiento, de forma que se encuentren lo más separadas del punto de entrada y del resto de la explotación.

Asimismo, el Ministerio recomienda mantener las áreas cercanas a las explotaciones lo más limpias posible, sin malas hierbas y sin agua estancada para evitar atraer a las aves migratorias y garantizar la eliminación de cadáveres en la explotación o en los edificios adyacentes.

Las demás medidas propuestas insisten en la idea de mantener una higiene estricta en las instalaciones. Entre ellas destaca la necesidad de intensificar los programas de limpieza, desinfección, desinsectación y desratización y controlar a los otros animales que vivan en la explotación.