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Reportaje:

'Enemigos' del FMI

Un libro de éxito en Argentina cuenta las interioridades de la organización financiera, la 'bicha' de los grupos anticapitalistas

Jorge Marirrodriga

Que un crítico del Fondo Monetario Internacional (FMI) diga que el organismo peca de arrogancia o pone a veces en marcha medidas que fomentan la corrupción no es sorprendente, pero sí es que lo haga uno de sus más altos ex funcionarios, que además presenció desde su cargo cómo su propio país se sumergía en el desastre económico y social.

Por ello, no es de extrañar que en las librerías de Buenos Aires, desde hace más de tres meses, uno de los libros más vendidos sea precisamente Enemigos, donde casi día a día, un alto responsable del FMI relata, explica y discute con un conocido periodista argentino lo que estaba ocurriendo en el país.

Durante 14 meses, el periodista Ernesto Tenembaum mantuvo correspondencia vía correo electrónico con Claudio Loser, el argentino que más alto ha llegado en la estructura del FMI, y lo que en principio era un mero contacto para celebrar una entrevista se convirtió en una apasionante conversación en la que, como en un combate de esgrima, abundan las fintas, los bloqueos y hasta algún ataque desesperado.

El resultado es un libro que está copando los primeros puestos de las librerías argentinas, compitiendo codo con codo -o lomo con lomo- con algunas superproducciones de la industria editorial internacional como el Código Da Vinci, y del que se espera que llegue a los 50.000 ejemplares vendidos.

Tras una dilatada carrera en el interior del FMI, Loser había llegado en 1994 a jefe del Departamento del Hemisferio Occidental y, desde esa privilegiada posición, asistió -no sólo como testigo, sino también como actor- al fulgurante ascenso y estrepitosa debacle de la economía de su país natal, pero jugando en el campo contrario.

Loser asistió a los años de la presidencia de Carlos Menem (1989-1999), cuando la paridad por decreto entre el dólar y el peso convirtió a Argentina en El Dorado de las inversiones extranjeras y a Buenos Aires en una de las ciudades más caras del mundo. Desde el mismo lugar presenció la quiebra del sistema financiero, el corralito, las protestas sociales, la devaluación drástica del peso y finalmente la suspensión de pagos, en 2001. En 2002 Loser fue apartado de su puesto.

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La conversación cibernética, mantenida con un estilo directo y desvinculado de farragosos tecnicismos, tiene algunas declaraciones sorprendentes, como cuando Loser compara el funcionamiento interno del FMI -la bicha de todos los grupos anticapitalistas del planeta- nada menos que con el Partido Comunista. Sobre el presidente de Alemania, Horst Köhler, anterior director gerente del FMI, Loser señala que tenía una visión casi religiosa del problema. "Sostenía que Argentina debía arrepentirse y pagar por sus pecados".

En un momento en que los actuales dirigentes del FMI hacen constantes referencias a la necesidad de seguridad jurídica en Argentina y la exigencia de "buena fe" en las negociaciones en asuntos como la deuda, Tenembaum recuerda cuestiones como que el FMI invitó a Menem a presidir la asamblea anual del Fondo celebrada en 1998 o que se concedieron gigantescos préstamos al país cuando el desastre económico era inevitable y sólo incentivaban la fuga de capital.

"A mí, que durante 10 años estuve enfrentado con esta problemática, la lectura del libro me refuerza en tres convicciones: no hay respuestas fáciles, es fundamental mantener abiertos los canales de diálogo, sobre todo cuando uno tiene la mayoría parlamentaria, y se impone construir instituciones que nos permitan evitar los males del pensamiento monolítico sin caer en un zig-zag inconsistente", destaca el prólogo, obra del ex presidente de Brasil Fernando Henrique Cardoso.

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Sobre la firma

Jorge Marirrodriga
Doctor en Comunicación por la Universidad San Pablo CEU y licenciado en Periodismo por la Universidad de Navarra. Tras ejercer en Italia y Bélgica en 1996 se incorporó a EL PAÍS. Ha sido enviado especial a Kosovo, Gaza, Irak y Afganistán. Entre 2004 y 2008 fue corresponsal en Buenos Aires. Desde 2014 es editorialista especializado internacional.

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