La igualdad es "un fundamento de la democracia"

"¿Por qué el Gobierno aplica sin rechistar la normativa europea respecto la matriculación de los coches y deja de lado la abundante legislación para las no discriminación de la mujer en los centros de decisión?". Esta pregunta quedó en el aire durante la presentación del Documento sobre mujeres y ciencia, del Observatorio de Bioética y Derecho de la UB.

El análisis comparativo de lo que ocurre en diversos países de la Unión Europea (UE) constata que en todos se produce una situación de discriminación. Ello obliga, según las autoras del estudio, "a promover medidas que corrijan esa discriminación y garanticen el acceso y la promoción de la mujer en condiciones de igualdad, en las actividades científicas y en el diseño de las políticas de investigación".

En el año 1988, el Parlamento Europeo ya alertó de que la falta de representación de las mujeres en la dirección y gestión en la vida académica y en la investigación es un problema muy extendido que requería una inmediata atención. Por su parte, la Comisión Europea ha definido la igualdad transversal como "un fundamento de la democracia" y lamenta las insuficiencias que aún hay respecto a la igualdad de oportunidades. Además, la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea dispone que el principio de igualdad no impide el mantenimiento o la adopción de medidas que ofrezcan ventajas concretas a favor del sexo menos representado.

El documento propone que el ordenamiento jurídico español incorpore y desarrolle la normativa de la Unión Europea sobre igualdad transversal, ya que es un ámbito prácticmente ignorado a pesar de que el derecho comunitario de cumplimiento obligatorio para los estados miembros tiene primacía y aplicabilidad directa.

"Las leyes están para ser cumplidas. A pesar de la sorpresa de muchos, que el Gobierno de (José Luis Rodríguez) Zapatero sea paritario es en realidad la aplicación de lo que promueve la UE", concluye María Casado, directora del Observatorio.