Los socialistas europeos cierran filas en defensa de la Constitución en Madrid

La Constitución europea contiene las respuestas a los retos que afronta la UE porque encarna "el espacio común de paz, seguridad, derechos y libertades" y, por tanto, es esencial que los ciudadanos la conozcan y la apoyen. Así lo manifestó ayer el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, que defendió el "nuevo rumbo" de España en política exterior", en el encuentro de líderes europeos, que se celebra en Madrid. El presidente de los socialistas europeos, Poul Nyrup Rasmussen, pidió a los socialistas franceses que abandonen su división y apoyen la Constitución.

El presidente del Gobierno español aprovechó la concentración de líderes europeos socialistas en Madrid para hacer campaña en favor de la Constitución Europea, defender sus valores e instar a sus correligionarios a que la difundan y la defiendan. Zapatero recordó que los españoles serán llamados a las urnas el próximo 20 de febrero para que se pronuncien en referéndum, e invitó a los líderes socialistas a que vengan a España a hacer campaña. El presidente español participó en la reunión de líderes del Partido Socialista Europeo (PSE), que se clausura este mediodía, en la que animó a los socialistas franceses a que apoyen el futuro tratado Europea porque "el proyecto de la nueva Europa" les necesita. "Los socialistas tienen que ser la voz más poderosa en defensa de la Constitución Europea", pidió el líder español. Paz, libertad, seguridad y derechos sociales son los valores que, a juicio de Zapatero, defiende esta Constitución y en torno a su desarrollo discurrieron los trabajos y postulados de esta reunión de socialistas. Todos miraban a sus compañeros franceses, que la próxima semana dirimirán su posición en un referéndum interno.

De manera solemne, el presidente del Partido Socialista Europeo, Poul Nyrup Rasmussen, pidió a los socialistas franceses que abandonen su división y apuesten por la futura Constitución. "Si sale que sí, ganará Europa, Francia y los socialistas franceses se acercarán a la victoria electoral en su país", animó Rasmussen.

Para que no haya dudas, el presidente español proclamó ante los socialistas europeos que España "ha puesto rumbo a una política exterior de futuro", entre cuyas prioridades está Europa, Iberoamérica, el Mediterráneo y la relación transatlántica".

Los principios que inspiran esta política, añadió, son: "La defensa de la paz, la legalidad internacional, la potenciación de Naciones Unidas y el multilateralismo". El líder español defendió los valores y el modelo social, político y económico que define, a su juicio, a los europeos, y, sin citar expresamente a Estados Unidos en su discurso, dijo que en la práctica se puede contraponer a Europa.

"La UE es la única organización política con poder propio, cohesión y solidaridad", defendió Zapatero. Los europeos escucharon al líder socialista defender su tesis sobre la alianza de civilizaciones que le sigue granjeando críticas del Partido Popular.

"La promoción de la democracia y los derechos humanos, el impulso a la cooperación y la lucha contra el terrorismo están en la base de mi propuesta de crear en Naciones Unidas una alianza de civilizaciones", resumió.

Zapatero pidió a sus compañeros que luchen para que no se eleve "un muro de incomprensión entre Occidente y el mundo árabe e islámico".