Gabo vuelve a Cartagena

Después de seis años sin viajar a Colombia, el premio Nobel de Literatura Gabriel García Márquez llegó el pasado miércoles, de manera sorpresiva, a Cartagena de Indias. Los informativos lo mostraron caminado por las calles del casco antiguo de esa ciudad amurallada, acompañado de su mujer, Mercedes Barcha, y varios amigos. "Visita sorpresa", titularon algunos medios locales.

Gabo (Aracataca, 1927), como llaman cariñosamente sus amigos al escritor, llegó como invitado al V Foro Iberoamericano, que reúne a empresarios, intelectuales y políticos. La noticia de su participación se mantuvo en secreto, por acuerdo entre el escritor y los organizadores de este evento que durante dos días discutirá temas como las globalización, los negocios y la educación.

"Me emociona volver a recorrer estas calles, estos rincones, ver los balcones..."

"Mantengan este foro en Colombia a ver si lo mantenemos a él", dijo el presidente Uribe

Es un foro a puerta cerrada -tanto que la prensa se ha topado con teléfonos colgados y portazos en las narices- y sin agenda definida. Participan, entre otros, los escritores Carlos Fuentes, Tomas Eloy Martínez y Nélida Piñon; Jesús de Polanco y Juan Luis Cebrián, presidente y consejero delegado del Grupo PRISA; los empresarios Gustavo Cisneros y Luis Carlos Sarmiento; los ex presidentes colombianos César Gaviria y Belisario Betancur, y el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo, Enrique Iglesias.

Será, como lo define el mexicano Carlos Fuentes, "un diálogo para la acción y una acción para el diálogo".

El presidente colombiano, Álvaro Uribe, fue el encargado de inaugurar el foro en el hotel Santa Clara, un antiguo y bello monasterio, el jueves por la noche. Tras destacar los esfuerzos que hace Colombia para superar sus dificultades, Uribe agradeció la presencia del Nobel y lo invitó a quedarse. "Hace mucho tiempo que el maestro García Márquez no pisaba esta tierra. Es una inmensa razón de regocijo para Colombia haberlo traído hoy. Mantengan este foro en Colombia, a ver si lo mantenemos a él aquí; lo necesitamos", dijo Uribe.

Desde hace tiempo, García Márquez sentía nostalgia de Colombia, de Cartagena, de su casa cerca de la muralla en el casco antiguo de la ciudad colonial. Se lo contó a su amigo el escritor y periodista Juan Gossain hace unos días, cuando este último lo llamó para conocer detalles de Memoria de mis putas tristes (Mondadori), la última novela del Nobel, que ya ha vendido cerca de medio millón de ejemplares (casi la mitad en España).

"Tenía pensado no contarlo, pero los hechos me fuerzan a ello", dijo Gossain en la emisora RCN. Y contó que García Márquez le dijo: "Acabo de terminar la novela y sólo estoy rogando una cosa: volver a Cartagena. No sabes la falta que me hace Cartagena de Indias".

Ayer en la mañana, los dos amigos volvieron a hablar por teléfono. "Estoy flotando desde anoche sobre esta ciudad; me emociona volver a recorrer estos rincones, estas calles, ver los balcones...", le contó Gabo a Gossain. Y le confesó también que pasó la noche en vela esperando la madrugada para ver el amanece y para ver el mar.

Como ya es costumbre, García Márquez ha hablado poco con la prensa. En su caminata por la ciudad comentó algunas cosas: "Fueron seis años sin venir a Cartagena", y desmintió que piense vender su casa, y mucho menos a Julio Iglesias. "Julio se inventó esa historia y se la dio a la prensa porque está perdiendo popularidad y quiere recuperarla", dijo a manera de broma.

La presencia del Nobel en Colombia coincide con el lanzamiento de Memoria de mis putas tristes, que se publicó el pasado 20 de octubre en España y Latinoamérica. El miércoles pasado fue el lanzamiento oficial en Bogotá. La venta en librerías se adelantó porque la obra, a pesar de las estrictos controles de los editores, fue pirateada. Las calles de las principales ciudades del país fueron invadidas por libros de menor calidad, mutilados y a menor precio.

"La piratería siempre afecta, aunque en este caso se actuó a tiempo", ha declarado Felipe Osa, de la Librería Nacional, una de las más importantes del país. Para este reconocido librero, la obra de Gabriel García Márquez será, indiscutiblemente, uno de los libros que se regalarán en Navidad. Las ventas, hasta el momento, han sido "buenas, sin llegar a los niveles multitudinarios que alcanzó Vivir para contarla", el anterior libro de Gabo.

Mañana por la noche, en la clausura del V Foro Iberoamericano, se presentará el libro Gustavo Cisneros un empresario global, biografía del empresario venezolano escrita por el escritor y periodista peruano-estadounidense Pablo Bochelet.

El libro, de Planeta, es, como dice Cisneros, una guía para que las nuevas generaciones entiendan el capitalismo, lo mejoren y se integren en él. El prólogo y la presentación de la obra fueron encargadas a la misma persona: Carlos Fuentes. El próximo jueves, este escritor presentará en la Fundación Santillana en Bogotá su libro Contra Bush, de Aguilar, una crítica demoledora al actual Gobierno de Estados Unidos.