35.000 enfermos llevan más de seis meses en lista de espera quirúrgica
71.000 personas aguardan una media de 81 días para una intervención de cataratas
El Ministerio de Sanidad hizo públicos ayer por primera vez los datos globales de la lista de espera quirúrgica en España. Más de 406.000 enfermos engrosaban a 31 de diciembre de 2003 dicha lista, que presentaba una demora media de 77 días. Casi 35.000 de esos pacientes (un 8,6%) llevaban más de seis meses aguardando la operación. La intervención con más pacientes en espera es la de cataratas (71.000 pacientes, con una demora de 81 días) y el tiempo de espera más largo se da en las intervenciones de juanetes (266 días) y prótesis de cadera (132). La ministra de Sanidad, Elena Salgado, se comprometió ayer a dar esta información cada seis meses, aunque sin desglosarla por comunidades para evitar "su uso partidista".
Los últimos datos recabados por el Ministerio sobre listas de espera para intervenciones quirúrgicas en España fueron analizados ayer en el seno del Consejo Interterritorial de Salud, que se celebró en Barcelona sin la presencia de los consejeros de las siete autonomías gobernadas por el PP.
Tras reconocer que las listas de espera constituyen "una de las principales preocupaciones de los ciudadanos", la ministra prometió analizar y compartir las experiencias que algunas administraciones ya llevan a cabo para reducir las demoras, que consideró todavía excesivamente largas.
Del total de 406.264 pacientes que aguardaban su turno para ser operados a finales de 2003, el 8,6% (cerca de 35.000 personas) llevaban más de seis meses de espera. Esta cifra supera con creces la que difundió a final de 2002 el Defensor del Pueblo, que cifró en 18.000 los pacientes que esperaban más de medio año para ser intervenidos, una situación que calificó de "clínica y socialmente inaceptable". El número de personas en lista de espera también es muy superior que la que dio el Defensor del Pueblo: 300.000 pacientes. Si se compara esta cifra de 2002 con la facilitada ayer de 2003 el aumento es de más del 25%.
El tiempo medio de espera se sitúa en 77 días, según los datos del Ministerio, una cifra alejada de los 45 días que el PSOE se comprometió a alcanzar como espera máxima en su programa electoral.
Salgado se mostró ayer dispuesta no sólo a analizar fórmulas para descongestionar las listas de espera, sino también a "perfeccionar" el sistema de medición de las demoras, de manera que se distinga entre las patologías de menor entidad, como el hallux valgus (los denominados juanetes), y las que comportan una peor calidad de vida para el paciente, como las cataratas o las que requieren una prótesis de rodilla o cadera. "No podemos destinar los mismos esfuerzos en reducir las esperas para todas las patologías sin distinguir su gravedad", dijo Salgado.
Por especialidades, las de traumatología, cirugía general y de aparato digestivo y oftalmología son las que concentran el mayor volumen de pacientes en espera, el 65% del total, según las cifras difundidas ayer.
Los tiempos de espera más prolongados se registran en cirugía maxilofacial (162 días), dermatología (113 días), neurocirugía (96 días) y cirugía vascular (93 días). Por procesos quirúrgicos, los de cataratas son los que concentran un número mayor de pacientes en lista de espera (71.504), seguidos de los de hernia inguinal (25.659) y los de juanetes (17.003). Estos tiempos se toman preguntando a cada persona cuánto llevan esperando, no cuánto han tardado en ser operadas, por lo que el tiempo de demora puede ser aún superior. Tanto los programas del PP como del PSOE en las últimas elecciones generales proponían la reducción del tiempo máximo de espera a 45 días, un 71% menos que la media actual.
Los consejeros presentes ayer en el Consejo Interterritorial resaltaron ayer que son pocos los países que hacen públicos sus cifras sobre esperas quirúrgicas. España las recabará y las difundirá, según anunció ayer la ministra, al entender que "la información permite hacer seguimientos y valoraciones" y "garantizar el éxito de los planes que se llevan a cabo para reducir las esperas".
Lo que no hará el Ministerio, destacó Salgado, es desglosar las cifras por comunidades autónomas, sino que difundirá la lista de espera global del sistema nacional de salud. "Anteriormente se habían usado estos datos con intereses partidistas", argumentó Salgado, quien enmarcó su decisión en el contexto de la política de "transparencia" de su ministerio.
A pesar de su decisión de informar sólo del cómputo global de las esperas quirúrgicas, el ministerio deja la puerta abierta a que cada comunidad autónoma "haga la difusión que crea necesaria sobre sus datos" (algunas comunidades, como Andalucía y Castilla-La Mancha, las tienen en Internet).
El Consejo decidió ayer mejorar la información de listas de espera en otros ámbitos, como consultas externas o pruebas diagnósticas, un compromiso que el PSOE adoptó también en su programa electoral.
2.200 pacientes de corazón con dos meses de demora
Los esfuerzos que en los últimos años han destinado las administraciones para descongestionar las listas de espera de cirugía cardiaca no han logrado todavía reducir las demoras hasta el máximo de 60 días fijado como objetivo. Las cifras del Ministerio de Sanidad revelan una espera media de 66 días para una intervención coronaria. Un total de 2.216 pacientes aguardaban a finales de 2003 para ser sometidos a una operación cardiaca, de los que el 3,73% (81 personas) superaban los seis meses de espera, una demora excesivamente larga para un tipo de intervención que suele ser crucial para la salud y la vida del paciente.
En el año 2000, los planes de choque para rebajar los tiempos de espera en cirugía cardiaca se extendieron en el territorio Insalud y en las distintas comunidades con las competencias en sanidad transferidas en aquel momento.
Era la respuesta ante la alarma social creada tras la denuncia del jefe de cirugía cardiaca del hospital Sant Pau de Barcelona, Alejandro Aris, quien en una carta a un periódico aseguró que siete enfermos del corazón habían fallecido mientras esperaban ser operados en el centro hospitalario.
Tras la denuncia del doctor Aris salieron a la luz pública numerosos casos de muertes en circunstancias similares a las descritas por el cirujano.
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