Vigo albergará la sede de la Agencia de Pesca de la UE
Los dirigentes de la UE se despidieron ayer con una inesperada pedrea de concesiones de agencias especializadas, que recibieron 10 países. España consiguió para Vigo la agencia de la UE que controlará la pesca. España aspiraba a obtener para Barcelona la Agencia de Seguridad Alimentaria, pero Silvio Berlusconi se la llevó para Parma.
La agencia de Vigo comenzará a funcionar en los próximos meses, con la misión de organizar el despliegue de los medios de inspección y vigilancia marítima sobre los recursos pesqueros.
Fuentes no oficiales señalaron que el reparto, que no figuraba en la agenda, había sido bloqueado por España, que pugnaba porque Barcelona acogiera la agencia alimentaria. José María Aznar se felicitó por un reparto que calificó de justo y razonable y explicó el cambio de actitud diciendo que para llegar a acuerdos hay que ceder y aprovechar las oportunidades.
Parma ganó a Barcelona
Barcelona había luchado intensamente con Helsinki. Berlusconi, por su parte, había declarado hace dos años en el Consejo de Laeken que cómo iba a instalarse la agencia alimentaria en una ciudad con escaso pedigrí culinario como la capital finlandesa existiendo Parma. Helsinki se quedó con la Agencia de Valoración de Sustancias Químicas.
Lisboa acogerá la Agencia de Seguridad Marítima, Colonia la de Seguridad Aérea y Lille será sede de la Agencia de Ferrocarriles. Londres tendrá la Escuela de Policía Europea y La Haya recibirá la Eurojust, el ente europeo de apoyo a la investigación y persecución de los delitos transfronterizos y transnacionales. Suecia y Grecia serán sedes, respectivamente, del Centro Europeo para las Enfermedades Transmisibles y de la Agencia de Seguridad de Redes Electrónicas.
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