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El 31,2% del gasto público en I+D se destinará en 2004 a fabricar armas

Los helicópteros Tigre y los carros de combate Pizarro se financiarán con esta partida

Los Presupuestos Generales del Estado presentados por el Gobierno para 2004 mantienen la tendencia de los últimos años de dedicar casi un tercio de las partidas destinadas a investigación y desarrollo (I+D) a gastos militares. En un total de 10 programas militares, que en su mayor parte corresponden a la compra en otros países o la fabricación repetitiva de unidades se gastarán casi 1 de cada 3 euros (un 31.2% de los 4.402 millones de euros), según los cálculos proporcionados por el diputado socialista Jaime Lissavetzky, quien denuncia la falta de fondos y la mala gestión en investigación civil.

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Juan Costa, ministro de Ciencia y Tecnología, aseguró el pasado martes en el Congreso de los Diputados que la Función 54 (donde se agrupan las partidas destinadas a I+D) crecerá en 2004 un 10%. Lo que no mencionó es que estas partidas corresponden en su mayor parte (un 51,6%) al llamado Capítulo 8, que a su vez en su mayor parte se dedica a financiar, mediante créditos a empresas, programas militares en distintas fases de ejecución. A pesar de los aumentos de los últimos años en estas partidas, España todavía no ha alcanzado el 1% del PIB en gasto de investigación y desarrollo, lo que significa que en investigación para objetivos civiles el porcentaje es todavía menor, cuando la media de la Unión Europea ronda el 2%.

El ministro de Defensa, Federico Trillo, ya anunció el pasado mes un plan de compra de armamento por valor de 4.176 millones de euros que se financiaría con las ventas de terrenos militares y con presupuesto del Ministerio de Ciencia y Tecnología. Mientras que las ventas de terrenos apenas han comenzado y se enfrentan en muchos casos a largos contenciosos, el dinero fresco supuestamente dedicado a I+D militar estará disponible a partir del 1 de enero de 2004 tras el trámite parlamentario. Se dedicará, entre otros programas, a la compra o fabricación de 24 helicópteros Tigre, cuatro submarinos, un buque para transportar 1.200 soldados y 212 carros de combate Pizarro. También se computa como I+D la compra de satélites de comunicaciones estadounidenses por parte del Ministerio de Defensa.

Incremento

El diputado Lissavetzky recuerda que el alto porcentaje destinado a I+D militar en los presupuestos de 2004 (un 31,2%) no tiene equivalencia alguna en Europa, donde la media de los fondos destinados a investigación militar sobre el total es, en porcentaje, del 14,5%.

Según datos de la Fundación por la Paz, los fondos públicos destinados a I+D militar se han incrementado un 400% entre 1995 y 2002. Según Costa, en la parte civil, se ha producido un incremento acumulado de un 66% en la financiación de proyectos por parte de la Dirección General de Investigación desde el año 2000, "gracias al crecimiento de la economía española en los últimos años". Este dato contrasta con la espectacular pérdida de peso de la investigación básica civil (los fondos destinados a financiar proyectos de investigación de los científicos españoles) respecto al total de fondos destinados a I+D (la Función 54). En 1996 se calcula que representaba un 17,5% del total, porcentaje que ha bajado en 2002 a un 9,3%. En euros, los fondos manejados por la Dirección General de Investigación han aumentado de 158,2 millones de euros en 1994 a 227,3 millones de euros en 2002.

Además de la reiterada denuncia de la dedicación de fondos de I+D a objetivos militares sólo lejanamente relacionados con la investigación, el PSOE recuerda los fallos de gestión que han caracterizado el Ministerio de Ciencia y Tecnología, creado por Aznar al inicio de la segunda legislatura, siguen vigentes. De la convocatoria de nuevos proyectos del año 2002, publicada en el mes de noviembre de ese año, ningún investigador ha recibido hasta ahora los fondos, a pesar de que sí han recibido la comunicación de la aceptación de sus proyectos de investigación y de la dotación correspondiente.

Becarios

Tampoco se ha publicado la convocatoria de becas de formación de personal investigador a pesar de que los becarios deberían incorporarse en el próximo mes de enero. Por otra parte, se han publicado este año, según estos datos, tres convocatorias para una misma actuación, la divulgación de la ciencia, lo que indica una clara desconexión entre los distintos departamentos.

Costa se comprometió el pasado martes a que el reiteradamente retrasado Estatuto del Becario, considerado insuficiente por los becarios predoctorales y postdoctorales, se "tramitará" a lo largo de este mes. También anunció la puesta en marcha de dos nuevas modalidades adicionales en el programa Ramón y Cajal de captación de investigadores, dirigidas a jóvenes investigadores e investigadores líderes.

Un plan que no se cumplió

El ministro de Ciencia y Tecnología, Juan Costa, anunció el pasado martes, el compromiso de acabar la tramitación y la aprobación del nuevo Plan Nacional de Investigación, para el plazo 2004 a 2007, con el objetivo de alcanzar el 1,4% de gasto de I+D respecto al PIB. Este objetivo es sólo ligeramente superior al que se fijó el Gobierno hace tres años, que fue el de alcanzar el 1,3% del PIB este año, en que termina el actual plan nacional.

El incumplimiento del plan ha sido flagrante, denuncia el PSOE. Ni siquiera teniendo en cuenta el espectacular aumento de fondos para gastos militares se ha conseguido alcanzar el 1%, en gran parte porque no ha aumentado la participación privada en los esfuerzos de investigación y desarrollo, a pesar de la reforma en la fiscalidad para hacer más atractivas las inversiones privadas en I+D. Al sector privado han ido muchos más fondos públicos, en forma de créditos y especialmente para programas militares, pero el sector no ha invertido mucho más que hace siete años.

Además, en la ejecución del plan todavía vigente se han dejado de gastar en los tres primeros años 1.024 millones de euros, asegura Jaime Lissavetzky, diputado socialista. Costa señaló en su intervención en el Congreso de los Diputados que el objetivo del Gobierno es conseguir que en 2007 el peso del sector privado en I+D sea del 59% (actualmente ronda el 50%, aunque esta cifra es discutida).

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