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LA POSGUERRA DE IRAK

La BBC se convierte en blanco de críticas tras admitir que David Kelly era su fuente

Diputados y amigos del científico piden responsabilidades a la corporación pública

La BBC se situó ayer en el centro de la crisis política que vive el Reino Unido tras admitir que David Kelly, el científico que se quitó o le quitaron la vida el jueves pasado, era la fuente principal en la que se basaron sus acusaciones de que el Gobierno de Tony Blair exageró los informes sobre Sadam Husein. Mientras varios amigos de Kelly y varios diputados pedían responsabilidades a la televisión pública y la acusaban de haber manipulado las informaciones del científico, el periodista Andrew Gilligan declaró que utilizó de manera correcta la información y citas de Kelly.

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Al admitir que Kelly era su fuente principal tanto en la información radiofónica del periodista Andrew Gilligan como en el reportaje de Susan Watts en televisión, la BBC ha provocado las iras del entorno del científico. Sus amigos creen que Gilligan exageró la información que le hizo llegar Kelly y que el mutismo de la corporación y las presiones de Defensa le llevaron al desespero. La corporación ha quedado en entredicho al identificar a Kelly como su fuente, porque hasta ahora siempre había sostenido que la fuente era un alto miembro de los servicios secretos y había dado a entender que aunque Gilligan habló con Kelly, éste no era más que una fuente secundaria.

Así lo siguió haciendo creer hace menos de una semana, cuando difundió con gran detalle la declaración del científico ante una comisión parlamentaria en la que éste parecía decir que él no era la fuente principal. En realidad, lo que Kelly dijo fue que, a tenor de lo publicado por Gilligan, él no podía ser la fuente porque no reconocía como suyas las informaciones hechas públicas en su crónica del 29 de mayo, en la que acusaba al Gobierno de Tony Blair de manipular los informes de espionaje para hacerlos más atractivos y obligar a insertar el dato de que Sadam podía lanzar un ataque con armas de destrucción masiva en 45 minutos.

En una nota hecha pública ayer por el director de informativos, Richard Sambrook, la BBC explica que ha decidido revelar su relación con Kelly de común acuerdo con la familia y asegura que "sigue creyendo que interpretó de manera correcta la información obtenida por nosotros durante entrevistas con el doctor Kelly".

Robert Jackson, el diputado conservador de la circunscripción electoral de Kelly, realizó unas duras declaraciones contra la BBC en las que reclamó la dimisión de su presidente, su director general, su director de informativos y Gilligan, e implicó al Consejo de Gobernadores de la corporación por respaldar la estrategia de la dirección de apoyar a su periodista frente a las acusaciones del Gobierno. "La BBC es responsable por no aclarar si Kelly era o no la fuente y poner toda la presión en él", declaró. "Si sólo había una fuente y la información de esa fuente fue alterada, es una crisis muy seria para la BBC que afecta a su integridad, su credibilidad y su moralidad. Y si Kelly es la fuente, Gilligan exageró. Y eso afecta a los gobernadores y a la cúpula de la BBC".

"¿La BBC cree de verdad en la exactitud de esas acusaciones?", se preguntó el periodista Tom Mangold, amigo personal de Kelly. "Nuestro trabajo es investigar las acusaciones. Kelly me dijo que él no las hizo. La BBC tiene que investigar si esas acusaciones eran ciertas o no. Y si no lo eran, tendrá que disculparse", dijo. Nick Higham, el corresponsal de medios de comunicación de la corporación, admitió que "las consecuencias de todo esto irán directamente a la cúpula de la BBC". Gilligan hizo pública otra nota en la que asegura que Kelly "no fue interpretado de manera incorrecta ni citado de manera incorrecta".

El diputado laborista Gerald Kaufman, presidente de la Comisión de Medios de Comunicación del Parlamento, declaró que "la manera en que la BBC ha llevado las cosas nos obliga a reflexionar sobre la forma en que la BBC se gobierna y cómo aborda las noticias".

Pero los apuros que pasa la corporación no exculpan al Gobierno, señalado en la prensa por su empeño en desmentir a toda costa a la BBC. Y ese a toda costa pasó por las presiones a Kelly y por la fatídica decisión de hacer público su nombre. El científico se sentía traicionado por el Ministerio de Defensa, según The Sunday Times, que desvelaba ayer algunos comentarios confidenciales de Kelly en una reciente entrevista y el contenido de correos electrónicos enviados por Kelly poco antes de quitarse la vida. Estos correos revelan que lo que quería era que la crisis pasara y poder volver a Bagdad para buscar las armas de destrucción masiva. Según el Times, Kelly sentía que Defensa le había "exprimido" y declaró que el ministerio le amenazó con identificarle. "Estoy escandalizado. Me dijeron que todo sería confidencial", declaró. Al final, su nombre fue hecho público y se cortó o le cortaron las venas.

Blair saluda a l primir ministro japonés, Junichiro Koizumi, ayer en la localidad de Hakone.
Blair saluda a l primir ministro japonés, Junichiro Koizumi, ayer en la localidad de Hakone.AP
Blair y su esposa, Cherie, descienden del avión en un aeropuerto militar cercano a Seúl.
Blair y su esposa, Cherie, descienden del avión en un aeropuerto militar cercano a Seúl.AP

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