Berlusconi demanda a los libros que revelan el origen de su dinero

Los autores y las editoriales que publicaron recientemente dos libros que indagan sobre los problemas judiciales y los orígenes de la fortuna del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, se arriesgan al cierre y a la bancarrota caso de triunfar las causas civiles interpuestas por Il Cavaliere contra ellos. Berlusconi y sus socios piden 50 millones de euros de indemnización a los autores de L'odore dei soldi y Le toghe rosse y a las respectivas editoriales, Editori Reuniti y Baldini & Castoldi. Los encausados denunciaron ayer la 'intimidación' que representa para escritores y periodistas este tipo de causa civil, con indemnizaciones astronómicas.

Varios de los implicados en las más de 15 causas civiles presentadas por Berlusconi (que incluyen al semanario Diario por el número 'Berlusconeide', al ex director de la RAI-2 Carlo Freccero y al cómico Daniele Luttazzi), que reclama 50 millones de euros, presentaron ayer en la Federación de la Prensa Italiana (FPI) un llamamiento a la opinión pública, y 'a quien pueda interrumpir esta espiral perversa' para que intervengan en su ayuda. La tesis de todos los presentes es que iniciativas como la de Berlusconi, el hombre más poderoso de Italia, amenazan con amordazar a la prensa y a las editoriales incapaces de afrontar un desafío económico de tal envergadura. Marco Travaglio, coautor de L'odore dei soldi (editado también en español por Península bajo el título El olor del dinero) insistió en que 'no significa que queramos huir de las querellas. No me considero intocable, pero si el primer ministro, el hombre más rico de Italia, quiere reparar su honor debería recurrir a la querella penal y no a una causa civil', que se limita a un resarcimiento económico. La querella, en cambio, permitiría que un fiscal investigara a fondo la credibilidad de los libros publicados y 'los encausados tendríamos derecho así a un proceso justo, con la opción de recurrir en apelación'.

Veltri se dirigió directamente a Berlusconi, que ayer se entrevistó en Trípoli con el líder libio Muammar el Gaddafi, en una visita relámpago a la ex colonia italiana, pidiéndole que 'no se implique en cosas tan insignificantes', teniendo en cuenta 'todos los problemas que tiene que resolver', en su calidad de primer ministro de un Gobierno que se enfrenta a una situación difícil.

Buena parte de la astronómica suma que reclama Il Cavaliere serviría para limpiar 'el honor mancillado' durante una transmisión televisiva, en vísperas de las elecciones de mayo de 2001, en la que el cómico Daniele Luttazzi entrevistó a Marco Travaglio a propósito de su libro L'odore dei soldi. El programa se emitió en la RAI-2 en un horario de máxima audiencia. Paolo Serventi Longhi, presidente de la FPI, resaltó que este tipo de causas con indemnizaciones multimillonarias aterrorizan a los periodistas que no pueden afrontar tales riesgos.

Berlusconi, que desde enero pasado, es también ministro de Exteriores, estuvo ayer absorbido por su viaje a Trípoli, con vistas a impulsar las relaciones con Libia, primer suministrador de petróleo a Italia. Libia exigió no hace mucho un resarcimiento por los daños causados durante la ocupación colonial. Aun así, las relaciones de amistad son sólidas y un hijo del coronel libio, Saadi el Gaddafi, entró en mayo pasado en el Consejo de Administración del Juventus, como representante de la Lafico, sociedad que posee el 7,5% de las acciones del club de fútbol de la familia Agnelli.