Las bolsas vuelven a caer por el temor a nuevos escándalos empresariales

Las bolsas vivieron ayer una nueva jornada de duros recortes. Unas caídas motivadas por el temor a nuevos escándalos financieros y a que la crisis de confianza empresarial se extienda al Viejo Continente. La francesa Vivendi, cuyas cifras ahora se cuestionan, bajó el 25% en la Bolsa y llevó a que París tuviera el mayor retroceso, con el 4,15%. El Ibex 35 cedió el 2,61%, mientras Londres el 2,97% y el índice Dax alemán el 3,91%. Además, se ha producido un retroceso en la confianza de los europeos, mientras el presidente del BCE avisa sobre la inflación.

Las bolsas no logran salir del círculo de pérdidas. Ayer se juntaron varios argumentos que provocaron fuertes descensos en los mercados europeos. Unas caídas que incidieron especialmente en los valores de telecomunicaciones y nuevas tecnologías y en aquellos títulos de mayores incertidumbres. El mercado español bajó el 2,61% (cuarta mayor caída del año), mientras el resto de plazas europeas salían peor paradas con descensos en torno al 4% en París y Francfort.

La razón de estos retrocesos se encuentra principalmente en la mala evolución de los mercados estadounidenses en la víspera. Unas caídas que tuvieron su continuidad en la jornada de ayer, donde a media sesión el índice Dow Jones perdía el 0,56%, en tanto que el tecnológico Nasdaq cedía el 2,35%.

Desplome de Vivendi

Pero además del negativo contagio de las bolsas de Estados Unidos, en Europa había también noticias para apoyar a los vendedores. Las dudas sobre la contabilidad de la francesa Vivendi provocaron un desplome de este valor que llegó a bajar un 40% para cerrar con un descenso del 25%. Este valor tiene un peso del 3,34% en el parisiense índice Cac 40, lo que llevó a esta Bolsa a ceder el 4,15% en la jornada de ayer. El temor de los inversores es que se produzcan casos de falsedad contable entre las firmas europeas, después de lo ocurrido con las estadounidenses Enron, World-Com y Xerox. La crisis de confianza en los resultados empresariales puede, pues, extenderse a Europa.

Además, el indicador de confianza en la economía europea registró un ligero resbalón en junio. Los datos publicados ayer por la Comisión Europea muestran una reducción general de tres décimas entre los principales actores económicos de la zona euro. En el conjunto de la Unión Europea la situación se mantuvo casi estable, al registrarse un descenso de apenas una décima. El clima de negocio también cayó dos décimas. Bruselas restó importancia a los datos y dijo que no son malos. Todo lo contrario que las bolsas europeas, que acogieron el doble anuncio con caídas.

El motivo principal de este retroceso en los países de la zona euro se atribuye a una pérdida generalizada de la confianza en todos los indicadores; de dos décimas en la construcción y de una décima en la industria, entre los consumidores y el comercio. El índice general se situó así en junio en los 99,6 puntos frente a los 99,9 puntos del mes de mayo.

PIB e inflación

El Ministerio de Finanzas alemán publicó ayer que el producto interior bruto (PIB) creció el 0,5% en el segundo trimestre del año, con lo que la tasa internual se sitúa en el 0,75%. Un dato que los mercados valoraron de pobre, y que obedeció sobre todo a la recuperación de la actividad manufacturera que, según el Ministerio de Finanzas, se va extendiendo a otros sectores de la economía.

Para caldear más el negativo ambiente que respiran los inversores, el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Wim Duisenberg, afirmó ayer que las perspectivas de estabilidad de precios en la zona del euro son 'menos benignas' que hace un semestre. 'La inflación ha decrecido menos abruptamente de lo esperado, y aleja la posibilidad de rebaja de tipos', dijo.