Wall Street y las telecomunicaciones impulsan a las bolsas europeas

Las bolsas europeas registraron ayer una jornada de ganancias sólo empañada por el fuerte retroceso de Francfort. El tirón lo dio la subida del 6,35% de Wall Street del miércoles, a lo que se añadió el sector de telecomunicaciones tras el anuncio de Telefónica y de la operadora finlandesa Sonera de congelar sus proyectos de telefonía móvil de tercera generación (UMTS). El Ibex 35 avanzó un 5,09%. Sólo la Bolsa alemana, que perdió, 3,09%, aguó la euforia que ayer vivieron los mercados europeos tras las tempestades de los últimos días. La perspectiva de que el resto de las telefónicas también paralicen sus planes de UMTS fue clave en el alza de ayer.

Las inversiones en telefonía móvil de tercera generación se habían convertido en un agujero negro para las compañías telefónicas y las compañías del sector habían sufrido más de un batacazo en el mercado bursátil a causa de este negocio. Muchos de los fuertes retrocesos que se habían registrado en las bolsas europeas desde mediados del año pasado y lo que va de 2002 se debieron a las perspectivas negativas del negocio de UMTS y, sobre todo, a la fuerte deuda que las operadoras habían contraído para comprar una licencia de telefonía móvil de tercera generación, y la iban a contraer si además querían poner en marcha el servicio. Hubo informes que predijeron que esas compañías no iban a obtener un céntimo de ganancia en este negocio hasta por lo menos dentro de 10 años.

Por ello, cuando Telefónica anunció a última hora del miércoles que iba a congelar la inversión en UMTS, su valor subió más de un 18% en la Bolsa de Nueva York. Ayer, esta decisión de la operadora española impulsó al Ibex 35 a ganar un 5,09%, la segunda mayor del año. Los títulos de Telefónica claramente impulsaron ese aumento al revalorizarse un 14,18%, mientras que su filial de móviles avanzó un 5,88%. Al imitar Sonera la decisión de Telefónica, para los inversores quedó bastante claro que las grandes compañías telefónicas que se metieron en el negocio de UMTS también están estudiando la congelación de esos proyectos. La holandesa KPN, por ejemplo, subió ayer en Amsterdam un 8,47%. Si los expertos creen que si Telefónica y Sonera han paralizado el proyecto, KPN, que es socia de ambos grupos en una de las licencias de UMTS en el mercado alemán, también lo hará. Ayer, un buen número de analistas consultados por la agencia Bloomberg calificaron de 'excelente' la decisión de las operadoras española y finlandesa.

'Es muy simple', comentó uno de ellos, 'la medida significa que el dinero ya no se les escabullirá como agua de las manos en un negocio que, de momento, no funciona'. Muchos debían compartir esta opinión, puesto que las acciones de France Télécom subieron ayer un 6,15% y las de la sueca Telia un 21,52%. Las de Telecom Italia también avanzaron, pero bastante menos, un 1,11%.

British Telecom, en cambio, perdió un 5,68%, pero porque ayer anunció que su beneficio neto en el primer trimestre fiscal (de marzo a junio) había caído un 94%. Deutsche Telekom no iba mal hasta que toda la Bolsa de Francfort, que cierra dos horas y media después del resto de los mercados europeos, perdió un 3,09% arrastrada por la caída del índice de confianza empresarial de Alemania del mes de junio, que apunta una recuperación más lenta de la economía del país, y de Wall Street, que finalmente cayó un 0,06%. Si el miércoles el avance de Nueva York amortiguó las pérdidas de las plazas europeas e impulsó al mercado alemán a ganar, ayer provocó el efecto contrario.

El mercado neoyorquino se vio afectado ayer porque en la noche del miércoles, después de que cerrase el mercado, AOL Time Warner, la mayor compañía mediática y de servicios de Internet del mundo, había reconocido que estaba siendo investigada por la Comisión del Mercado de Valores (SEC) estadounidense. La SEC está analizando con lupa cómo se han contabilizado ciertas transferencias de ingresos publicitarios a la filial de Internet, America Online. Las acciones de AOL Time Warner caían casi un 23% al filo del cierre de ayer.

Estancamiento económico

El caso de AOL Time Warner atiza la desconfianza de los inversores de unos mercados muy susceptibles a estos escándalos desde que estalló el de Enron. Pero, añadido a esto, ayer se conoció que las ventas de pisos y casas de segunda mano habían descendido 1l 11,7% en junio, el mayor descenso en siete años, y que las órdenes de bienes no perecederos como ordenadores o maquinaria habían caído un 3,8% el mes pasado, el mayor retroceso en siete meses. Estos datos inquietan a los inversores porque son señales de que la recuperación económica estadounidense se ha frenado.

La mayoría de los expertos ya dan por hecho que la economía estadounidense volverá a desacelerarse en los próximos meses. El último informe de Merril Lynch, por ejemplo, sostiene que la recuperación de la actividad en EE UU se verá en los próximos meses pero a un ritmo menor y con más de un bache en el camino.