PP y PSOE buscan presidente para la comisión de investigación

El pleno del Congreso de los Diputados discutirá y aprobará hoy la creación de una comisión de investigación sobre el caso Gescartera. El Grupo Popular y el socialista negociaron ayer el método y el objeto de su trabajo. E intentaron consensuar, con más problemas de lo esperado, el nombre de su presidente.

CiU y Coalición Canaria, las dos formaciones que suelen ejercer este papel de arbitraje, se mostraban ayer remisas a aceptar dicho compromiso porque vislumbran que populares y socialistas quieren emplearse con dureza en esas sesiones. Ambos grupos ya no tienen tan claro como en el pasado que ser elegidos por su supuesta neutralidad para presidir una comisión de investigación en el Congreso pueda considerarse sólo como un motivo de orgullo.

Incluso los parlamentarios elegidos por el PP y el PSOE para pertenecer a la comisión sobre Gescartera son conscientes de que el trabajo que les espera será intenso (seis días a la semana) y desagradable en algunos momentos.

Desde luego, no hay voluntarios. Los responsables del PP y del PSOE se han sondeado sobre el perfil del diputado más adecuado para ejercer ese cometido y se han tropezado con muchos inconvenientes.

El veterano Luis Mardones, de CC, casi un clásico en estas labores, no dio precisamente un paso al frente cuando el secretario general del Grupo Popular, Gabriel Cisneros, se lo sugirió en un ascensor de la Cámara baja.

Y también surgieron problemas para definir el mejor candidato de CiU. En primer lugar porque nadie del PP les pidió oficialmente que ofrecieran un nombre. La oferta se la trasladó el portavoz del PSOE, Jesús Caldera, al de CiU, Xabier Trias, en una comida el martes.

López de Lerma y Jané

Además, al PP no le gustaban algunos posibles aspirantes de la formación nacionalista, mientras el PSOE consideraba que los sugeridos por los populares eran demasiado blandos. La elección parecía ayer limitada a dos nombres: el veterano miembro de la Mesa Josep López de Lerma, que presidió en su día la comisión Roldán, y Jordi Jané.

El PSOE, además, registró ayer una serie de enmiendas para precisar al máximo algunos conceptos sobre el objeto y la logística de la comisión.

Los socialistas pretendían que la duración de la investigación, prevista para dos meses, se prolongase a tres; que se equiparase el número de diputados de PP y PSOE (cinco cada uno) y se adjudicasen dos a cada uno de los otros grupos. De entrada, el PP rechaza ambas pretensiones.