Los becados por Exteriores dicen que con los nuevos plazos no podrán acabar sus tesis

El colectivo de becarios de la AECI considera a todas luces 'insuficiente' el proceso de revisión de las prórrogas que ha puesto en marcha este organismo para intentar que su nueva política de becas -que reducirá de cuatro a dos años el tiempo máximo de subvención para el doctorado- no afecte a los estudiantes que ya están en nuestro país. Si en junio denegaba la prórroga a los investigadores que llevaban tres años en España, y renovaba por un año más de 'forma improrrogable' las becas de los que llevaban uno y dos; tras las críticas del Defensor del Pueblo y de la Conferencia de Rectores de Universidades Españolas (CRUE) ha reconsiderado su posición.

Jesús Silva, director general de Relaciones Culturales y Científicas del Ministerio de Asuntos Exteriores, garantiza que 'a nadie se le va a devolver a su país sin terminar el trabajo por el que vinieron aquí'. Para ello ha 'revisado uno a uno' los casos de los investigadores que llevaban ya tres años en España y les ha concedido prórrogas de entre dos meses y un año 'en función de sus necesidades'. A los que llevaban uno y dos cursos les ha concedido un año más y la AECI 'estudiará' en la próxima convocatoria si las vuelve a renovar. De momento ha aprobado 1.139 renovaciones de 1.551 doctorandos.

Pero al colectivo de becarios no le convence esta respuesta. Según sus cálculos, a unos 36 doctorandos extranjeros de tercer curso se les ha denegado la renovación en esta segunda revisión dejándoles sin medios económicos para finalizar su tesis, y las prórrogas parciales concedidas 'son en muchos casos insuficientes'. Judith Domínguez, una de las representantes del colectivo en Madrid -a la que se le ha concedido una renovación hasta el 31 de octubre cuando tenía pensado leer su tesis en julio de 2000- teme también que la próxima convocatoria de las becas de la AECI (que previsiblemente será publicada el próximo enero) aplique las nuevas reglas del juego a los que ya estén aquí.

No son los únicos disconformes. Egipto ha decidido no enviar a más estudiantes a nuestro país una vez que se hayan ido los que ya están aquí, si la AECI no reconsidera su posición de acortar a dos años el tiempo máximo de duración de las becas de doctorado, según confirmó a este diario el propio embajador, Hussein Haridy. Y fuentes de la Embajada de Costa Rica aseguraron que su país ha presentado una queja escrita al Gobierno.

España tenía dos instrumentos para financiar las becas de doctorado para extranjeros: la convocatoria general, que salió 54 veces hasta el año 2000 (de 120.000 pesetas al mes), y el programa Mutis (de 130.000), que se creó en 1992, tras la cumbre de jefes de Estado iberoamericanos. Aunque en ambas se contemplaba el carácter excepcional del cuarto año, la práctica habitual de la AECI era renovarlas de forma casi automática. Para las dos convocatorias (que incluyen además del doctorado maestrías, pasantías o diplomaturas) Exteriores dedicó casi 5.000 millones en 2001 para un total de 3.461 becarios y prevé incrementar su dotación un 10% en 2002.

A partir del próximo curso, la AECI otorgará dos tipos de becas: las MAE (Ministerio de Asuntos Exteriores), cuya dotación se 'está estudiando elevar', y las Carolina, de la fundación que lleva este mismo nombre y a la que la AECI ha transferido 500 millones de pesetas. Pero las becas de esta fundación no tienen nada que ver con la tesis doctoral: son para que 'líderes emergentes' latinoamericanos hagan cursos no reglados organizados por la propia fundación.