El aporte 'patriótico' de las empresas españolas
El Gobierno argentino trata de reunir al menos mil millones de dólares (unos 200.000 millones de pesetas) para sumar al proyectado recorte general de gastos y alcanzar la meta de 6.500 millones de dólares de déficit fiscal comprometida con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para este año. En seis meses Argentina ya acumula un pasivo anual de 5.000 millones de dólares y debe hacer frente todavía a unos 4.000 millones en vencimientos a corto plazo.
La petrolera Repsol-YPF se apuntó a la iniciativa con 150 millones de dólares (unos 3.000 millones de pesetas) a cuenta del impuesto a la renta y dio el paso adelante cuando los funcionarios del Gobierno argentino salieron a mendigar contribuciones 'patrióticas' y voluntarias para cubrir el bache fiscal y calmar a los sectores políticos y sindicales que exigen 'el pago de la fiesta a los sectores financieros y a las empresas privatizadas que ganaron muchísimo dinero durante los últimos diez años'.
Telefónica de Argentina promete unos 100 millones de dólares, igual que la italo-francesa Telecom. Y la petrolera argentina Pérez Companc. Ayer se esperaba que alzaran la mano Metrogas, Aguas Argentinas, Edesur, entre otras compañías, bajo administración española, y algunos bancos.
El comunicado oficial de Repsol-YPF aclara que se trata de una 'contribución excepcional del impuesto a las ganancias, a compensar en ejercicios futuros'. Los portavoces del llamado Grupo Productivo de Argentina que integran la Unión Industrial, la Cámara de la Construcción y Confederaciones Rurales, creen que el Gobierno no debería comprometerse a tomar los préstamos como anticipo de impuestos ni obligarse a devolverlo. El préstamo se complementa con la emisión de un 'bono patriótico' a bajo interés entre bancos y empresas por 1.500 millones de dólares.
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