Zapatero reta a Aznar a abrir el debate sobre la corrupción

Rodríguez Zapatero, con formas tranquilas aunque contundentes, rechazó las amenazas de Aznar. El pasado sábado, en Gotemburgo (Suecia), el presidente del Gobierno había aprovechado un comentario sobre el informe del Grupo de Estados contra la Corrupción (GRECO) del Consejo de Europa, en el que se critica la falta de autonomía del fiscal general de Estado, para aludir al caso Ercros y advertir de que si el PSOE quiere hablar de corrupción él lo hará 'con todas las consecuencias'. 'Hace seis años', abundó Aznar, 'se hablaba de corrupción y había hechos; ahora se habla, pero no los hay, probablemente porque nos hemos quitado mucho de eso de encima'.

'A mí [Aznar] no me va a parar ni un minuto, porque sobran las advertencias', replicó ayer el líder socialista ante un público entusiasta -más de 2.000 personas- que llenaba el Auditorio de Barcelona. A pesar de las salvas de aplausos que las críticas al PP cosechaban, Zapatero no abandonó su imagen trabajosamente construida de responsable líder de la oposición. 'Nosotros no lo vamos a hacer [la utilización política de la corrupción]; no vamos a convertir la vida política en un lodazal', como hizo el PP en los últimos años de los Gobiernos socialistas, aseguró.

En este sentido, el portavoz del PP, Rafael Hernando, pidió ayer a Rodríguez Zapatero "que no haga más el ridículo con sus declaraciones" sobre corrupción "porque puede salir escaldado".

La junta de fiscales de sección de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo estudiará precisamente mañana la propuesta del fiscal encargado del caso Ercros, Bartolomé Vargas, para que Josep Piqué declare como imputado en relación con la venta de Ertoil. Vargas realizó esa propuesta tras leer el informe elaborado por la titular del Juzgado Central de Instrucción número 3 de la Audiencia Nacional, Teresa Palacios, en relación al destino del dinero de la venta de Ertoil a la compañía francesa Elf cuando Piqué era consejero de Ercros, propietaria de la petrolera.

La reunión de la junta de fiscales estaba prevista para el pasado martes y fue aplazada una semana a instancias del fiscal general del Estado, Jesús Cardenal. Si la propuesta de Vargas fuera aprobada mañana sería elevada a la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo para que tome una decisión definitiva.

Apoyo a Maragall

Las referencias al caso Ercros no fueron las únicas relacionadas con Piqué en el mitin de Zapatero. El ministro de Exteriores y Aznar fueron los principales blancos de las críticas del líder del PSOE. Zapatero acusó al Gobierno de no tener proyecto europeo. Y ahí empezó la parte más celebrada de su mitin: la alusión a los saludos con que el ministro de Asuntos Exteriores obsequió al presidente de Estados Unidos, George W. Bush. 'Deseo que Piqué no vuelva a agachar la cabeza siendo ministro de Asuntos Exteriores; que no se incline ante nadie un ministro que representa a 40 millones de personas', dijo. Zapatero calificó de 'servil' la actitud de Piqué, y entre vítores de los asistentes al mitin, que el propio Zapatero llegó a calificar de 'interactivo', aseguró: 'El próximo Gobierno del PSOE no agachará la cabeza ante nadie, como no lo hizo ningún Gobierno de Felipe González'.

'¿Conocéis a algún catalán ilustre con tradición de lucha por las libertades capaz de agachar la cabeza?', preguntó a un público entusiasta el líder del PSOE.

En el mitin más importante que ha protagonizado en Cataluña, Zapatero explicitó su apoyo al proyecto que lidera Pasqual Maragall, que calificó de 'bueno para Cataluña y para España'.

Los líderes del PSC y del PSOE coincidieron en sus críticas a la visión de España que tiene el PP. 'Aznar gobierna España, pero no la entiende', aseguró Zapatero. 'Estaré feliz el día que Pasqual sea presidente de la Generalitat y demuestre que puede haber una Cataluña, con su identidad, que conviva con el resto de pueblos de este país. Yo estaré a su lado. Comparto muchas cosas de la visión de España que tiene Maragall', agregó Zapatero, quien apostó por construir la España que 'nuestros abuelos, el tuyo [en alusión al poeta Joan Maragall] y el mío [oficial del Ejército de la República] anhelaron'.