El titular de Exteriores no ve motivo para abandonar el Gobierno si es imputado en el 'caso Ercros'

El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Piqué, no tiene en este momento intención de dimitir aunque resulte imputado en el caso Ercros, según puso ayer de manifestó en una entrevista en Abc. Preguntado por ese diario sobre si abandonaría el Gabinete en caso de ser imputado, Piqué respondió: '¿Por qué debería hacerlo? Si tuviera algún sentimiento de responsabilidad, lo habría dejado hace mucho tiempo'. Piqué asume que si el Tribunal Supremo plantea un suplicatorio al Congreso para poder procesarle 'habría que decir que sí. Yo no tengo ninguna duda, pero es una decisión que no me corresponde', añade en alusión a que sería el Grupo Popular el que, con sus votos, determinaría la aceptación o rechazo del citado suplicatorio.

El ministro de Justicia, Ángel Acebes, declaró ayer a Europa Press que el Gobierno no ha dado instrucciones al fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, para evitar la imputación de Josep Piqué en el caso Ercros, como no lo ha hecho 'en ningún otro caso'. En esa entrevista, Acebes dio su explicación de por qué el Gobierno no acepta la petición de las asociaciones de fiscales de limitar el mandato del fiscal general del Estado y de fijar las causas de su cese: 'El nombramiento del fiscal general atribuido al Gobierno está en la Constitución, y en el Pacto [de la Justicia] no se ha considerado conveniente limitar su tiempo en cuanto al cese, porque quien le nombra debe tener también las facultades para relevarle'.

Por su parte, el portavoz socialista en la Comisión Constitucional del Congreso, Diego López Garrido, instó ayer al presidente del Gobierno, José María Aznar, a que obligue al ministro de Asuntos Exteriores a declarar en el caso Ercros como prueba de que sí está comprometido en la lucha contra la corrupción. López Garrido añadió que Aznar utiliza 'un lenguaje de vaquero matón' cuando lanza la advertencia de que podría hablar de la corrupción que hubo bajo Gobiernos socialistas. Una actitud que contrasta, añadió, con la actitud obsequiosa, 'rayana en el ridículo y la pleitesía que ha tenido con George W. Bush'.