El PP amenaza al PSOE con recordar sus casos de corrupción si ataca a Piqué
Los socialistas piden a los populares que apliquen su código ético
Los portavoces parlamentarios del PP y del PSOE, Luis de Grandes y Jesús Caldera, intercambiaron ayer reproches y descalificaciones de grueso calado. El origen de la trifulca fue la petición del fiscal del caso Ercros de imputar al ministro de Asuntos Exteriores, Josep Piqué. El PSOE considera que Piqué debe dimitir si resulta imputado, en cumplimiento de la 'doctrina' que mantenía el PP cuando hacía oposición al Gobierno socialista: todo alto cargo salpicado por un caso que estuviera en los tribunales debía desaparecer de la escena política sin aguardar a sentencias judiciales. Para defender al ministro de Asuntos Exteriores, el PP esgrime el caso Filesa, los GAL y hasta la renuncia del ex fiscal general del Estado Eligio Hernández, 'que dimitió poco antes de que se dictaminara que su nombramiento fue ilegal', rememoró De Grandes. 'El PSOE está bombardeando el terreno para crear un gran clima, creando crispación cuando no la hay', acusó el portavoz del PP. Tras el cruce de acusaciones, unos y otros se esforzaron en señalar que no tienen voluntad de hablar de corrupción.
El único dirigente que sin ambages informó ayer de que sí hablará de corrupción en el debate sobre el estado de la nación fue el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares. 'Aznar demuestra una flaca memoria con lo que hacía en la oposición, que era pedir responsabilidades políticas con independencia de las judiciales', recordó Llamazares. Éste aseguró que el Gobierno tiene que responder de la situación de 'dos ministros quemados', el de Exteriores, Josep Piqué, y el de Medio Ambiente, Jaume Matas, éste 'por presunto delito de fraude electoral'.
Por el contrario, el PSOE asegura que no quiere hablar de corrupción, si bien no consiente que el PP amenace con la posibilidad de hacerlo. Caldera subrayó: 'Aznar sometió a sospecha a todos los políticos del PSOE, y exigía dimisiones nada más que un tribunal se dirigía a cualquier socialista. ¿Ya no hay esa doctrina?'. Caldera precisó que 'el PSOE no pide el cese de Piqué sino que [el PP] aplique sus compromisos y su código ético'.
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