Kofi Annan pide que se multiplique por 10 el gasto contra el sida en África
El secretario general de la ONU da prioridad al acceso de la población a antirretrovirales
El sida, que mata a 2,8 millones de personas al año, fue inevitablemente protagonista de la cumbre, que se clausura hoy. Annan proclamó su 'prioridad personal' en la lucha contra la pandemia, que afecta a 36 millones de personas en todo el mundo, 25 millones de las cuales son africanas. África ha enterrado a las tres cuartas partes de los 20 millones de víctimas mortales del sida.
'Necesitamos dinero', dijo Annan. 'La guerra contra el sida no puede ganarse sin combatir de frente y en una dimensión mucho mayor que la que hasta ahora hemos abarcado'.
Annan propuso multiplicar hasta por 10 la actual inversión contra el sida en África. Instó a crear un 'fondo global' de entre 1,3 y 1,8 billones de pesetas (el 1% del gasto militar mundial, recordó el secretario general), en comparación con los 185.000 millones que invierten normalmente los países en vías de desarrollo. 'La cifra que planteo parece mucho dinero', dijo el secretario general, 'pero dada la cantidad de riquezas que hay en el mundo, no es imposible reunirlo'.
Un candidato a gestionar ese 'fondo global' sería el Banco Mundial. La ONU confía también en la Fundación Bill y Melinda Gates, que el pasado año invirtió 185.000 millones de pesetas en proyectos de salud por todo el mundo y que ayer anunció su apoyo al llamamiento de Kofi Annan a una 'movilización general' en la lucha contra el sida con 'un nuevo compromiso financiero'.
Clinton
La cumbre escuchó también al ex presidente estadounidense Bill Clinton. 'Los que pertenecemos a países desarrollados debemos dar dinero, pero cada uno de los aquí presentes deben planificar', dijo a los mandatarios africanos. Clinton señaló que no sería imposible llegar a los 1,3 billones de pesetas contra el sida, y que Estados Unidos podría aportar la cuarta parte, 'que es lo que gastamos el año pasado en equipamientopara oficinas'. El ex presidente indicó que esa cifra equivale al 1% del recorte de impuestos que Bush está impulsando.
El sida ha puesto contra las cuerdas las economías de los países africanos, cuyos sistemas de salud son impotentes ante la pandemia. Toda una generación de jóvenes se ha visto diezmada, con fatales consecuencias para esas sociedades. Por eso el secretario general de la ONU insistió en lo decisivo de la actitud del mundo desarrollado e hizo un llamamiento para conseguir financiación de gobiernos y empresas. Paralelamente, exigió a los países pobres que dieran prioridad en sus presupuestos a la construcción de sistemas sanitarios.
El secretario general proclamó las líneas generales de su estrategia de 'guerra total' contra el sida. Entre esas prioridades, desarrollar campañas de educación y prevención sanitarias, sobre todo entre los jóvenes, que son la mitad de los seropositivos africanos; esas campañas incluirían la posibilidad de asesoramiento, así como de poder hacerse análisis y de contar con condones.
Otro aspecto fundamental sería reducir la transmisión de la enfermedad de madre a hijo, con terapias específicas para embarazadas seropositivas. 'Debemos evitar esa infección, la más injusta y cruel de todas', dijo Annan. Sólo el año pasado unos 600.000 niños africanos se infectaron del VIH por esa vía.
Además, el secretario general instó a asegurar el cuidado de la mayoría de la población, que no tiene acceso a tratamiento de antirretrovirales. Esos medicamentos deben hacerse accesibles y deben potenciarse los servicios básicos sanitarios en cada comunidad. Annan animó a los países en vías de desarrollo a producir sus propios medicamentos genéricos 'dentro de los términos de los acuerdos internacionales de comercio'. El secretario general dialogó recientemente -con anterioridad a la retirada de las multinacionales farmacéuticas contra Suráfrica el pasado día 19- con las grandes empresas sobre la necesidad de permitir a los países pobres fabricar e importar genéricos.
No olvidó Annan entre sus prioridades la atención a los 13 millones de niños a los que el sida ha dejado huérfanos en el mundo. 'Ésta es una conferencia acerca del futuro de África', recalcó.
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