Ultimátum del Gobierno navarro para que se entierren las harinas animales

La polémica entre el Gobierno regionalista navarro y la Mancomunidad de Pamplona, dirigida por un edil socialista, por la negativa de ésta a que se entierren harinas animales en el vertedero de Góngora, junto a la capital, se encrespó ayer. El Ejecutivo, por boca de su consejero de Agricultura, Ignacio Martínez Alfaro, lanzó un ultimátum a la entidad para que en un plazo de 48 horas permita el enterramiento de las harinas procedentes de los MER (materiales específicos de riesgo). En caso contrario, el consejero aconsejará al presidente foral, Miguel Sanz, que se interpongan de inmediato las acciones penales y civiles que sean necesarias contra la Mancomunidad, cuyo contenido ultiman los servicios jurídicos del Ejecutivo de UPN.

La negativa de la Mancomunidad ha colapsado el tratamiento de restos MER en Navarra y la recogida de vacas muertas. Los socialistas, que cuentan en este asunto con el apoyo del resto de la oposición, acusaron a UPN de intentar 'tapar' el problema con 'amenazas' judiciales.

Mientras, el Ejecutivo vasco anunció ayer que va a distribuir 150.000 folletos y 3.000 carteles entre las carnicerías de la comunidad autónoma con las respuestas a las principales preguntas que se plantean los ciudadanos acerca del mal de las vacas locas.

El objetivo es que los carniceros repartan a su vez este material entre los consumidores cuando se acerquen a comprar carne de vacuno. El tríptico explicará cuál es la situación real del problema, qué actividades se llevan a cabo para su control y seguimiento y dará las claves necesarias para que los ciudadanos se desenvuelvan con confianza a la hora de hacer la compra.