_
_
_
_
Entrevista:

"He tenido tiempo para escribir más"

García Márquez habla por primera vez de su enfermedad y de su próximo libro de memorias

Gabriel García Márquez afirma que el tratamiento de linfoma al que estuvo sometido hace un año ha sido una "enorme lotería" en su vida. En una entrevista que hoy publica el diario colombiano El Tiempo -y de la que aquí se recogen algunos extractos-, el escritor habla por primera vez de su enfermedad y cuenta cómo marchan sus memorias, que serán publicadas el próximo año.Pregunta. Durante el último año ha habido toda clase de especulaciones sobre su estado de salud. ¿Cuál es la verdad?

Respuesta. Hace más de un año fui sometido a un tratamiento de tres meses contra un linfoma, y hoy me sorprendo yo mismo de la enorme lotería que ha sido ese tropiezo en mi vida. Por el temor de no tener tiempo para terminar los tres tomos de mis memorias y dos libros de cuentos que tenía a medias, reduje al mínimo las relaciones con mis amigos, desconecté el teléfono, cancelé los viajes y toda clase de compromisos pendientes y futuros, y me encerré a escribir todos los días sin interrupción desde la ocho de la mañana hasta las dos de la tarde. Durante ese tiempo, ya sin medicinas de ninguna clase, mis relaciones con los médicos se redujeron a controles anuales y a una dieta sencilla para no pasarme de peso. Mientras tanto, regresé al periodismo, volví a mi vicio favorito de la música y me puse al día en mis lecturas atrasadas. Ahora estoy mucho más al corriente de la actualidad y nunca había disfrutado más de mis amigos. Todo esto me ha dado el tiempo y el buen estado de ánimo para escribir las 1.200 cuartillas del primer tomo de mis memorias, que acabo de terminar, y espero iniciar el segundo en enero, después de terminar uno de los libros de cuentos y revisar a fondo el borrador del otro.

Más información
Gabo, de nuevo en pie de guerra
Una noticia esperada

P. Desde hace ya varios meses circula por Internet un texto que le atribuyen a usted, en el cual se declara enfermo de muerte y se despide de la vida. ¿De dónde salió eso?

R. Lo único que me preocupa es que me muera por la vergüenza de que crean que yo escribí algo tan cursi. Lo leí hace poco, y lo que más me sorprendió es que mis lectores pudieran creer que fue escrito por mí. La única explicación que se me ocurre es que alguien está recibiendo mucho dinero por la divulgación. Ni siquiera se tomó el trabajo de escribirlo, porque es un texto robado: el verdadero autor es un joven ventrílocuo mexicano que lo escribió para su muñeco, y no tiene nada que ver con la divulgación. Más aún: alguien le aconsejó que me demandara por firmar y divulgar un texto suyo, y creo que tendría razón. Sin embargo, también tengo que agradecerle en parte a ese texto anónimo el haber recuperado el tiempo y el sosiego que había perdido por la desgracia de la fama.

P. No hablemos más de los textos apócrifos, hablemos de lo que usted sí está escribiendo. ¿En qué van sus memorias?

R. Acabo de terminar el primer tomo de unas 1.200 cuartillas, que pueden ser 900 y tantas páginas con una tipografía cómoda. Empieza con la vida de mis abuelos maternos y los amores de mi padre y mi madre a principios del siglo y termina en 1955, cuando publiqué mi primer libro, La hojarasca, hasta viajar a Europa como corresponsal de El Espectador. El segundo volumen seguirá hasta la publicación de Cien años de soledad, más de 20 años después. El tercero tendrá un formato distinto, y sólo serán los recuerdos de mis relaciones personales con seis o siete presidentes de distintos países.

P. ¿Ya les tiene título?

R. El título general de los tres tomos no es más que la pura verdad: Vivir para contarlo...

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_