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Investigadores en números rojos

Enrique de la Rosa, del Centro de Investigaciones Biológicas (CSIC, Madrid), trabaja en procesos relacionados con enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer; sabe que le han concedido 14 de los 21 millones que pidió en su último proyecto, presentado en la convocatoria del Plan Nacional de I+D de septiembre de 1999; lo que no sabe aún es cuándo le llegará ese dinero. Su proyecto anterior acabó en mayo. "Me dejan en blanco cinco o seis meses, es una forma encubierta de recortar presupuesto", afirma. Pero, en su opinión, "lo peor es que los investigadores contratados se quedan en la calle, porque los contratos deben estar adscritos a un proyecto".Su laboratorio funciona en parte gracias a un proyecto de la Comunidad de Madrid que dura sólo un año; como consecuencia, una investigadora contratada que trabajaba con él ha recibido una oferta para colaborar cinco años en Estados Unidos en el laboratorio de un discípulo del neurocientífico recientemente premiado con el Nobel Erik Kandel.

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Jaime Renart, del Instituto de Investigaciones Biomédicas (CSIC, Madrid), está en situación parecida a la de De la Rosa. Pidió 22 millones para continuar su trabajo investigando las señales que controlan la muerte de las células y le han dado 14. Su proyecto anterior acabó en abril. "Estoy ahora en cero", dice, pero puede seguir trabajando gracias a los préstamos internos de su centro. Está a la espera de que salgan convocatorias de organismos distintos a la Administración central.

En su mismo centro, los grupos de Ana Aranda, de Ángeles Rodríguez de la Peña y de otros seis investigadores más tienen un problema ligeramente distinto: en su caso llevan ya varios años con el proyecto en marcha, pero el pago anual correspondiente no les ha llegado aún, pese a que se esperaba para julio. Pero el presente es sólo una preocupación más para ellas. "Lo que me asusta es lo que pasará el año que viene, porque el proyecto se nos habrá acabado y, como este año no ha salido aún ninguna convocatoria de nuestras áreas, no hemos podido presentar ningún proyecto nuevo", dice Aranda. Por su área de investigación, Aranda concurre a las convocatorias de biomedicina de promoción general del conocimiento, pero esa rama es justo la que no salió en la convocatoria del pasado mayo, porque, debido a los retrasos, no se había resuelto la convocatoria del año anterior.

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