El Museo de Arte de Cataluña abre la puerta a la creación contemporánea

El Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) ha decidido ampliar hasta la actualidad su recorrido artístico, que comienza con el románico y termina en los años cuarenta. Un nuevo espacio, denominado "sala de síntesis", dará cabida, aún de manera indefinida, a las creaciones artísticas contemporáneas realizadas desde el periodo en que se cierran las colecciones del museo hasta el presente. En el acto de presentación del proyecto museográfico se anunció el acuerdo por el cual el Ministerio de Cultura entra en el patronato del MNAC con tres representantes.

Casi de refilón, y sin querer reconocer lo significativo del gesto, Eduard Carbonell, director del MNAC, anunció la incorporación en el proyecto museográfico del centro de un espacio en el que se incluirían "diez o doce obras desde los años cuarenta hasta hoy. Es una manera de recordar que esto todavía sigue vivo", dijo. "Se trata de una sala fuera de circuito que no tiene por qué representar un tránsito con el Museo de Arte Contemporáneo", explicó.La fijación de los límites históricos de los museos de Barcelona ha sido un tema de amplia y larga polémica, que actualmente parecía zanjada al comenzar la colección del Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona (Macba) a finales de los cuarenta, es decir, al finalizar las colecciones del MNAC. La creación del nuevo espacio parece cuestionar el acuerdo.

El acto de ayer incluyó, con la presencia de Jordi Pujol, un recorrido por las obras de remodelación de los espacios que albergarán las colecciones de arte renacentista, barroco y de los siglos XIX y XX. En el paseo se pudo imaginar el futuro restaurante en la primera planta del museo. Desde este privilegiado espacio se podrá disfrutar de una vista de la ciudad con las fuentes de Montjuïc como telón. Pero antes, en la planta baja del museo, el futuro visitante encontrará los nuevos espacios dedicados al Renacimiento y al Barroco. En estas salas se podrán contemplar los cuadros Inmaculada Concepción, de Zurbarán; San Pedro y San Pablo, de El Greco; Martirio de San Bartolomé, de Ribera, y San Pablo, de Velázquez, entre otras muchas obras.

En el ala izquierda de la primera planta, el museo situará el rococó, el romanticismo y un espacio dedicado a Marià Fortuny, del que se podrá contemplar La batalla de Tetúan. El ala derecha estará dedicada a los siglos XIX y XX, con obras procedentes básicamente del antiguo Museo de Arte Moderno firmadas por Casas, Nonell, Sunyer, Torres García, Clarà, Hugué, Gaudí, Mir y Dalí.

La puesta en marcha definitiva del MNAC está prevista para 2003. Actualmente se pueden visitar las secciones dedicadas al románico y al gótico. El proyecto arquitectónico de las obras de la tercera fase, iniciadas en febrero del presente año, ha sido realizado por los arquitectos Gae Aulenti y Josep Benedito, y será definitivamente hecho público en octubre.

Una página que cierra el MNAC es el acuerdo alcanzado el pasado miércoles por el Ministerio de Cultura, Ayuntamiento de Barcelona y Generalitat de Cataluña por el que se incorpora a tres representantes del ministerio al patronato del museo. El consejero de Cultura, Jordi Vilajoana, explicó que la nueva composición del patronato será de seis miembros en representación de la Generalitat, cinco del Ayuntamiento y dos representantes de los mecenas del museo.

En esa reunión también se desbloqueó la aportación económica del ministerio. El coste total de las obras es de 14.769 millones de pesetas, aportados a partes iguales por las tres instituciones.