_
_
_
_

140 técnicos censuran la gestión del director del Instituto Nacional de Meteorología

La actuación de Coca en el caso de los aerolitos reabre la crisis en el organismo público

El malestar de los técnicos (en su mayoría físicos) del Instituto Nacional de Meteorología por la gestión de su director, Eduardo Coca, ha desembocado en un escrito de censura suscrito por 140 funcionarios. Los promotores del documento apoyan la convocatoria de una asamblea para el próximo día 26, en la que se debatirá la gestión del director, al que acusan de "usurpar" las opiniones de los técnicos y de haber congelado varios programas de investigación, entre ellos, el de cambio climático. Los críticos acusan a Coca de actuar en el episodio de los aerolitos sin consultar a los expertos.

Más información
Anticuado y burocratizado

La protesta de los técnicos-funcionarios del Meteorológico -140 de los 500 en plantilla en la sede central- incide en una crisis que se arrastra desde que hace dos años la ministra de Medio Ambiente, Isabel Tocino, nombró director del Instituto a Eduardo Coca. En marzo del año pasado, los funcionarios se quejaron del deterioro que sufría el instituto y del peligro de perder el tren de la modernización en el que están embarcados sus homólogos europeos.Ahora, los funcionarios se quejan de que los programas de colaboración científica con instituciones internacionales en los que España intervenía están paralizados por la ausencia de la dirección en sus órganos de gobierno o porque a las personas que participan en esos programas no se les permite viajar.

"No hay directrices de actuación. El malestar es general. Todo el mundo se queja. Se han cometido muchos errores y se van cerrando puertas. No existe el apoyo de la dirección. La proyección a través de la Organización Meteorológica Mundial ha quedado mermada y perjudicada", dice Juan María Cisneros, experto en el estudio del ozono y promotor de la protesta.

Cisneros cita como ejemplo de la falta de apoyo el proyecto que él mismo dirige de análisis de la capa de ozono en el hemisferio norte. "No se pueden hacer los sondeos de la estación de Barajas (la única existente en la península Ibérica). Desde esta estación se hacían radiosondeos diarios, semanales y esporádicos que estaban reglamentados, pero se han paralizado por falta de personal", añade Cisneros.

Aunque el Meteorológico es el órgano que asume el estudio del cambio del clima y la representación de España en los grupos científicos que integran el Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPPC), se ha dejado de acudir a los plenos o no se les permite acudir a las personas que se han venido ocupando del tema. Luis Balairón, experto español en ese foro, se ve obligado a presentarse como experto a título particular, porque no se le permite asumir la representación del instituto.

En la nueva reestructuración de plazas del Meteorológico se ha encomendado la dirección de ese área a Bartolomé Orfila, esposo de la subdirectora general de Programas Especiales e Investigación Climatológica, Rosario Díaz-Pabón Retuerta, que ayer precisó a este diario que la plaza se cubrió por concurso.

Otro de los aspectos criticados de la gestión de Eduardo Coca es su afán de notoriedad o lo que algunos técnicos del Meteorológico denominan "usurpación de las cuestiones puramente técnicas" en cuantas manifestaciones efectúa el organismo público a los medios de comunicación.

Uno de los funcionarios consultados explica: "Existe un descontento general. Por eso no nos ha llamado la atención su desafortunada comparecencia cuando se precipitó a decir que los aerolitos no tenían nada que ver con la meteorología. El Consejo Superior de Investigaciones Científicas le rectificó al decir que se trataba de fenómenos meteorológicos".

Con relación a este fenómeno, fuentes del instituto señalan que Coca no se ha dirigido a los servicios técnicos correspondientes para pedir su opinión. "Nos hemos visto desautorizados científicamente ante la opinión pública", añaden estas fuentes. Tampoco hubo ninguna representación de este organismo en el comité de expertos que reunió el CSIC para estudiar los aerolitos. Solamente cuando el CSIC lo solicitó se incorporó el meteorólogo Luis Muniosguren a ese comité.

Asamblea para mañana

La asamblea convocada para mañana (y solicitada por los sindicatos) ha sido autorizada en segunda instancia por el Ministerio de Medio Ambiente. Una petición inicial de Cisneros fue remitida por Coca al ministerio, quien la denegó por no cumplir los requisitos.

En la reunión se debatirá la adopción de "acciones a seguir", entre ellas la elaboración del perfil idóneo que debe reunir un director (Coca es técnico de la Administración del Estado), para su envío al presidente del Gobierno, José María Aznar.

Este periódico trató ayer sin éxito de recabar la versión de Eduardo Coca. Un portavoz del instituto minimizó la protesta y puso en duda la existencia de las 140 firmas críticas. "Esta iniciativa está promovida por las mismas personas de siempre, que no poseen ninguna representatividad", señaló.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_