Bruselas no cree la explicación de Coca-Cola sobre las intoxicaciones

La Comisión Europea consideró ayer "poco verosímiles" las explicaciones que Coca-Cola ha dado sobre las intoxicaciones que bebidas de esta marca produjeron en junio pasado en Bélgica y Francia, según un informe de la dirección general de Protección del Consumidor publicado ayer y divulgado por Internet. "La imposibilidad por parte de Coca-Cola de determinar formalmente el origen de la contaminación impide establecer una clara correlación con los problemas patológicos registrados", señala el informe.La multinacional había atribuido las molestias e intoxicaciones que los refrescos provocaron a varias decenas de escolares a los vapores emitidos por ciertas sustancias químicas que habían contaminado el barniz que recubría unos lotes de botes de refresco. Los expertos de Bruselas tampoco están de acuerdo con la versión de los responsables de Coca-Cola de que existió una psicosis colectiva, y añaden que los casos graves y las indisposiciones sufridas por los niños anulan esa posibilidad.

Por el contrario, a los miembros de la Comisión sí les parece verosímil que una partida de gas carbónico en mal estado fuera la causa del deterioro de una partida de botellas producidas en Bélgica. Las autoridades belgas prohibieron la venta de todas las bebidas de la marca Coca-Cola el 14 de junio; París recomendó al día siguiente la no comercialización y el no consumo de estos productos. Estas prohibiciones fueron anuladas a lo largo de julio, tras la retirada de las partidas sospechosas del mercado.