50 intelectuales y escritores salen en defensa de la ampliación del horario de los bares de copas

Los bares de copas han conseguido un valioso refuerzo en sus filas a la hora de luchar por su reivindicación más polémica: la de ampliar el horario de cierre de sus locales. Un manifiesto de 50 intelectuales y escritores apoya desde ayer esta petición, siempre y cuando los locales estén debidamente insonorizados. Entre las firmas figuran las de los escritores Antonio Gala, Almudena Grandes, José Luis Sampedro, Soledad Puértolas, la del historiador Ian Gibson y la del humorista José Luis Coll. El equipo de gobierno de la Comunidad, del PP, ha prometido negociar con los empresarios.

El catálogo de espectáculos públicos, aprobado en noviembre pasado por el Gobierno regional, del PP, con el consenso, entre otros, de los representantes de los bares de copas y de los vecinos afectados por el ruido nocturno, establece que los locales deben echar el cierre a las tres de la madrugada, de lunes a jueves, y media hora más tarde en fines de semana. Pero, tras varios meses de experiencia, los empresarios nocturnos sostienen que cerrar a esa hora les hace perder "el 80% de lo que recaudaban los fines de semana", según explica José Luis Salazar, presidente de la Asociación de Bares de Copas, que aglutina a 800 socios. Por ello esta organización reivindica ahora que se les permita abrir más tiempo. "Eso sí, siempre y cuando los locales estén debidamente insonorizados y cumplan con los requisitos legales y municipales preceptivos", aclara Salazar.

Promesa de negociar

El consejero de Economía, Luis Blázquez, responsable regional de la negociación del reglamento aprobado, prometió durante la campaña electoral reabrir las negociaciones para ver si se puede o no ampliar el cierre. Blázquez ya se manifestó a favor de alargar horarios, "siempre que no repercuta en el legítimo derecho al descanso de los vecinos que viven en las zonas de copas". Para muchos de los intelectuales que apoyan el manifiesto en favor de la ampliación de horarios, el reglamento aprobado no es más que una medida restrictiva, prohibitiva, que no soluciona el problema del ruido. Como contrapunto, lanzan una serie de propuestas alternativas para las madrugadas, como la apertura nocturna de centros culturales o de polideportivos, iniciativa esta última que se ha llevado a cabo en Fuenlabrada. Asimismo, los firmantes del manifiesto consultados por este periódico diferenciaron entre el ruido en la calle (responsabilidad del Ayuntamiento) y el originado en el interior de los locales (que compete a sus dueños).

La Asociación de Bares de Copas de Madrid emitió ayer un comunicado en el que concluye: "Con su firma, estos intelectuales apoyan la necesidad de potenciar la noche madrileña en su dimensión cultural, lúdica, económica y creadora de empleo. 700.000 personas salen a divertirse el viernes y el sábado noche. Es mejor prolongar el cierre para evitar el consumo en la calle y garantizar el derecho al descanso. Además, así se aleja a los jóvenes de un ocio negativo, evitando situaciones de violencia, brotes racistas y xenófobos".