La ONU alerta sobre la inminente escasez de alimentos en la zona

Una grave crisis de alimentos amenaza a la población albanesa que permanece en Kosovo desde el inicio del bombardeo de las fuerzas de la OTAN. Así lo confirmó ayer Catherine Bertini, directora ejecutiva del Programa Mundial de Alimentación (PAM) de Naciones Unidas durante una conferencia de prensa en Londres. "Podrían quedarse sin alimentos dentro de entre 10 a 15 días", aseguró.El PAM calcula que los suministros que tenía almacenados en el interior de Kosovo han sido "robados o saqueados" por las fuerzas serbias poniendo en peligro el futuro del pueblo kosovar. "El sistema de distribución interno está colapsado a consecuencia del conflicto. Además, la crisis de alimentos amenaza con ser un problema a largo plazo porque no se espera recoger ninguna cosecha este año", advirtió en Londres.

Bertini evitó hablar de hambruna puesto que, dijo ayer, "hambruna implica que un elevado número de personas muere de hambre y esto no está sucediendo en Kosovo". Sin embargo, el PAM desconoce el total aproximado de albanokosovares que están o pueden encontrarse en situación crítica en las próximos días. "Estamos en el principio de una potencial catástrofe humana y nos preparamos para lo peor", señaló. El problema del hambre tiene una solución ardua. El PAM como el resto de las organizaciones humanitarias internacionales abandonaron Kosovo en vísperas del bombardeo. "Llevamos más de una semana sin distribuir alimentos en Kosovo y los suministros deben estar disminuyendo rápidamente", confirmó por su parte un portavoz de la Cruz Roja británica.

Parar las persecuciones

Para Trevor Roe, del programa de Naciones Unidas, la respuesta a la crisis debe partir del Gobierno de Milosevic: "Pedimos a las autoridades serbias que dejen de provocar movimientos de población. Deben dejar de perseguir a la gente", exigió ayer. La campaña de ayuda para los refugiados se intensificó ayer con el compromiso del Gobierno británico a destinar 10 millones de libras (unos 2.450 millones de pesetas) a la zona, según confirmó en el Parlamento de Westminster Claire Short, ministra para la Cooperación Internacional. Por otra parte, las fundaciones benéficas del país han convocado al Comité de Emergencia para Desastres en un ejercicio extraordinario destinado a recaudar el máximo posible de donaciones en el mínimo tiempo.Por otro lado, Médicos Sin Fronteras calificó ayer en Barcelona la situación en Kosovo como "un agujero negro humanitario en el que la población sufre el acoso de las fuerzas serbias", informa Efe. Esta organización está preparando tres cargamentos con medicinas y material médico y logístico con destino a Albania, Macedonia y Montenegro, donde disponen de 24 cooperantes.

Cruz Roja Española también se ha puesto en guardia, y enviará hoy dos camiones a Albania con 30 toneladas de ayuda humanitaria valoradas en 26 millones de pesetas. Estos dos camiones transportan mantas, sacos de dormir, literas, útiles de cocina, botiquines y grupos electrógenos. La entidad ya ha distribuido material sanitario a los hospitales de Yugoslavia para atender a las víctimas del conflicto. A su vez, la Agencia Española de Cooperación Internacional ha preparado una partida de 150 millones para ayuda de los refugiados albanokosovares.