Reinhard Mohn rechaza las empresas basadas en la disciplina y la jerarquía
El editor alemán recibe hoy el Premio Príncipe de Asturias
El editor alemán Reinhard Mohn (Gütersloh, 1921), fundador del grupo de comunicación Bertelsmann y presidente de la fundación del mismo nombre, afirmó ayer en Oviedo que tanto el sistema político como los métodos de dirección de empresas deben ser permanentemente "cuestionados" como un necesario mecanismo de actualización de los mismos para adecuarlos a las circunstancias históricas.
Los sistemas basados en "la disciplina y la jerarquía ya no valen", dijo, y propuso su sustitución por métodos participativos que permitan la realización de las personas. Mohn recibirá hoy en el teatro Campoamor, de Oviedo, el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades, dotado con cinco millones de pesetas, de manos de Felipe de Borbón. El presidente de la Fundación Bertelsmann anunció que donará el importe del galardón a la biblioteca pública de Mieres (Asturias), como contribución al esfuerzo que esta institución viene realizando desde hace años, en colaboración con la Fundación Bertelsmann, para el fomento de la lectura en las escuelas.
Junto con Reinhard Mohn, otros 18 galardonados con los premios Príncipe de Asturias en su 17ª edición recibirán esta tarde el galardón en la capital asturiana. Entre ellos, el escritor Francisco Ayala y el fotógrafo Sebastião Salgado.
En una conferencia que Reinhard Mohn impartió ayer en el aula magna de la Universidad de Oviedo, el fundador de Bertelsmann propuso un cambio en los modelos de dirección y de gestión tanto de las empresas privadas como de los asuntos públicos, que permita reemplazar los caducos sistemas jerárquicos por un estilo de dirección que definió como "cooperativo y participativo". Se trata, dijo, de conceder "más libertad e iniciativa al individuo", de manera que la aceptación de objetivos comunes, "definidos de forma adecuada", permita una mayor delegación de responsabilidades y la implicación de todos los sujetos en la consecución de los fines propuestos. "Involucrar a los colaboradores y motivarlos para que hagan aportaciones" es la manera adecuada para crear "un caldo de cultivo que permita generar un nuevo colectivo de dirigentes".
Mohn, que desde hace años viene defendiendo este modelo participativo, que él mismo ha implantado con resultados exitosos en su propio grupo empresarial, sostuvo ayer que "la sociedad también se puede beneficiar de ello" porque, tanto en la empresa privada como en la política, "hay que aprovechar las capacidades e iniciativas de todos los ciudadanos involucrándolos en la búsqueda de soluciones".
Artículo de Reinhard Mohn en la página 72.
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