Ángeles Marco y García Sevilla muestran su forma de ser mediterráneos
Ambos artistas exponen en el IVAM su producción de los últimos años
Hay que pasear muy sosegadamente entre las instalaciones de Ángeles Marco y los cuadros de Ferrán García Sevilla para llegar a comprender que en la obra de dos artistas tan diferentes hay algo en común. Los dos pertenecen a la misma generación, los dos han nacido a orillas del Mediterráneo y ambos confiesan inspirarse en su entorno inmediato, que es el mismo. Sus obras se exponen conjunta y simultáneamente, desde ayer y hasta el 5 de julio, en el IVAM Centre del Carme, de Valencia.
Nada menos típico -ni menos tópico- que una instalación de Ángeles Marco. Ella afirma que se inspira en lo que ve a su alrededor; en las calles, las casas, los balcones, los tejados de esa ciudad -Valencia- en la que nació en 1947 y en la que trabaja habitualmente. «Yo no necesito irme por ahí en busca de motivaciones. Mi propio entorno me sugiere constantemente. Claro que eso no se percibe a simple vista, pero está en el trasfondo de todos mis trabajos», asegura.Su Taller de la memoria, que es como se titula la exposición recién inaugurada, es una profunda revisión de las series escultóricas en las que viene trabajando desde 1987. Salto al vacío, Presente-instante, etcétera, actúan como «activadoras de espacios», en palabras de Román de la Calle, comisario de la muestra.
Marco no expondrá sola. En las mismas fechas y en el mismo museo podrán verse los cuadros que Ferrán García Sevilla ha ido pintando en las dos últimas décadas. Estrictamente coetáneo de Marco y tan mediterráneo como ella -nació en 1949, en Palma de Mallorca-, tanto su obra como su discurso son, a primera vista, bien diferentes.
Los temas que le preocupan son los mismos que interesaron a Goya o a Paul Klee, los temas eternos del arte, «algo así como acotar el territorio. Sin usar el poder, sin voluntad de matar a nadie..., simplemente acotarlo conceptualmente. Una preocupación tan antigua como no mezclar churras con merinas...», ironiza.
En el Carme, Ferrán Sevilla expondrá unos setenta cuadros. El artista los ha organizado en lo que llama «bloques energéticos». La vida y la muerte están presentes en sus enunciados. «Uno de los bloques es la metafísica: nacer, renacer, morir; el yo fundido; la guerra y la violencia; la energía..., y dentro de cada uno de esos temas están mezclados cuadros de estos 20 años».
Desde su primera etapa como conceptualista, en la que practicó el body art y la performance, García Sevilla articula su obra narrando y construyendo su propio mundo simbólico.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.