Un equipo cubano explora los pecios de la escuadra española hundida
La mayor parte de los pecios españoles que formaron parte de la escuadra del almirante Cervera, hundida frente a las costas de Santiago de Cuba en 1898, se encuentran en un "estado de conservación aceptable" y mantienen bajo el agua sus estructuras principales. Esta fue una de las conclusiones a que llegó recientemente un equipo de buzos y científicos cubanos que exploró los pecios españoles, desperdigados en el mar en un área de más de 50 millas frente a la segunda ciudad de la isla.La escuadra española, compuesta por cuatro acorazados, el Almirante Oquendo, el Infanta María Teresa, el Vicaya y el Cristóbal Colón, y dos contratorpederos, el Furor y el Plutón, fue destruida íntegramente el 3 de julio de 1898, después de cuatro horas de desigual combate con una flota de guerra norteamericana al mando del almirante Sampson, cuyo tonelaje era casi el doble de la española, y contaba con cuatro acorazados y un crucero acorazado, entre otros buques de guerra.
Según el equipo cubano, la joya de los pecios de la escuadra española es el Cristóbal Colón, hundido en las cercanías del río la Mula, a unas 48 millas de la boca de la bahía de Santiago. El Almirante Oquendo, que tenía 103 metros de eslora, perdió sus componentes de madera, pero conserva sus dos calderas y dos cañones en la proa.
"La mayor parte de los pecios, excepto el Furor, conservan sus estructuras principales", dijo Pedro Soberats, uno de los coordinadores del equipo, al semanario cubano Juventud Rebelde. Según Soberats, el Furor está prácticamente sepultado a una profundidad de entre cinco y diez metros.
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