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Las personas próximas a jubilarse podrán aportar más a un plan privado

La comisión de Economía del Congreso aprobó la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos de 1998, en la que se introduce una enmienda de CiU según la cual las personas próximas a la jubilación podrán aportar más de 1,1 millones de pesetas a su plan de pensiones. El límite de aportación y la edad se fijarán en un reglamento posterior. Con carácter general, se sube el límite de deducción fiscal al 20% de los rendimientos del trabajo o a 1,1 millones (la menor de las dos cantidades).Estas medidas anticipan parte de las recomendaciones de la subcomisión del Congreso encargada de diseñar la reforma de los sistemas complementarios de previsión social, que hoy se reunirá para aprobar un documento de propuestas al Gobierno. El informe se ha consensuado entre el PP, CiU y el PNV, lo que ha motivado la retirada del PSOE de esa subcomisión. Entre las medidas que se proponen figura elevar del 10% actual al 15% la deducción fiscal que disfrutan los seguros de vida.

Esta propuesta se incluirá en la reforma global del IRPF que prepara el Ministerio de Economía y Hacienda, así como la mayoría de las que afectan a los planes y fondos de pensiones. Para éstos se establece la liquidez como principio básico, aunque se permitirá el rescate antes de la jubilación de las aportaciones en situaciones especiales que no se especifican.

Acuerdo en el Congreso

En cuanto al tratamiento fiscal de las rentas percibidas en el momento de la jubilación, el principio de acuerdo establece que tributarán como renta normal, salvo en la parte correspondiente a plusvalía (diferencia entre lo aportado y lo percibido). Aquí, la recomendación es que su tratamiento fiscal sea mejor que el de otros instrumentos de ahorro, en concreto, los fondos de inversión. Éstos pagan a Hacienda el 20% de la plusvalía, siempre que la inversión se haya mantenido más de dos años.Los tres grupos parlamentarios quieren sobre todo fomentar los sistemas de empleo, es decir, los que acuerdan las empresas y sus trabajadores. Al respecto, proponen modificar la composición actual de las comisiones de control en las que los sindicatos tienen ahora la mayoría.

También se quieren favorecer acuerdos en las empresas para que parte del incremento salarial pactado se destine a un fondo de pensiones. Igualmente, se recomienda que la empresa pueda deducir las aportaciones sin que para ello tenga que imputarlas a cada trabajador. Para los fondos que ya existen, se darán 10 años de plazo a las empresas para que los separen de su propio balance, decisión que habrán de tomar antes de que finalice 1998.

El PP se comprometió ayer a estudiar, dentro de la reforma del IRPF, dos enmiendas de IU a la Ley de Acompañamiento que fueron rechazadas: poner un límite a la deducción por compra de vivienda y que no desgraven los gastos privados de enfermedad, siempre que estén cubiertos por el sistema público.

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