Casi la mitad de los españoles deja la casilla del 0,5% del IRPF en blanco

Menos cruces. En el último ejercicio de la declaración de la renta casi la mitad de los españoles -42,26- no ha marcado las casillas destinadas a colaborar mediante sus impuestos con la Iglesia, o bien, con "otros fines sociales". La Iglesia ha perdido así un 1,7% de los declarantes. El descenso. en otros fines de interés social" ha sido mayor, un 4%, según datos del Secretariado para el sostenimiento de la Iglesia perteneciente a la Conferencia Episcopal Española. Las dificultades técnicas, el olvido o la comodidad de los contribuyentes parecen ser las principales causas.

"El 75% de los contribuyentes delega su declaración a terceras personas. Ésto supone un fuerte componente de dificultad y de olvido a la hora de participar en el 0,5%", aseguró ayer el director del Secretariado para el Sostenimiento de la Iglesia de la Conferencia Episcopal, Juan José Beltrán Yagüe, durante la presentación de la Campaña de la Asignación Tributaria 1997 a favor de la Iglesia Católica.El secretario general de los obispos españoles, José Sánchez González, se refirió a la comodidad que busca el contribuyente a la hora de hacer su declaración: "El contribuyente va a lo fácil. Realiza la declaración de la renta por sistema informático, por teléfono o agencias anónimas, y cuanto menos le preguntan, mejor". En el último ejercicio el número de personas que no marcó la casilla sobre el 0,5% del IRPF aumentó en un 6% respecto al año anterior, según datos de la Iglesia. "Que casi la mitad de los españoles no rellene la casilla es realmente preocupante", subrayó Sánchez.

"Retocar el sistema"

En 1993 los españoles destinaron más dinero en su declaración de la renta a la Iglesia que a "otros fines". En 1994 los contribuyentes prefirieron aportar el dinero a las ONG. Según Sánchez: "Hasta 1993 el número de asignaciones fue en aumento para la Iglesia, pero a partir de ese mismo año empezó a disminuir. Coincidió con la introducción de la agencia de Hacienda", apuntó.

La Iglesia ya ha formulado unas propuestas al Estado para reformar el actual sistema. Sánchez no quiso precisar: "Podría ser el aumento del porcentaje del 0,5% en lo destinado a la Iglesia, o repartir a medias las casillas en blanco de este apartado entre la Iglesia y 'otros fines', pero pueden haber otras soluciones. Para eso están los técnicos". El Gobierno todavía no ha dado una solución definitiva al problema planteado por la Iglesia, pero el secretario del Episcopado mostró su esperanza de que en breve dé una respuesta definitiva. "El principio de acuerdo entre la Iglesia y el Estado es intocable, pero sí reformable. Se debe retocar el sistema sin hacer nada que toque la letra de los acuerdos", aclara Sánchez. Un acuerdo entre el Estado y la Iglesia prevee que ésta reciba anualmente una cantidad similar, que ronda los 20.000 millones de pesetas. Este año han correspondido 19.602 millones. "Del 0,5% del IRPF hemos recibido 14.134 millones y el resto como complemento del Estado", especificó Beltrán.

En opinión de los obispos, el descenso en el apoyo de los declarantes se debe a las "dificultades del impreso" y a la "contraposición entre la Iglesia Católica y otros fines de interés social". "No creo que se deba a causas ideológicas o de pérdida de vinculación con la Iglesia", comentó Sánchez.

Los 14.134 millones de pesetas destinados en 1995 a la Iglesia representan un poco más del 36% del total, además de un descenso del 1,7% del año anterior. Lo destinado a "otros fines" ha sido de un 21,14%, es decir, un 4% menos que el año anterior. En total 12.294 millones de pesetas de los que se hacen cargo el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales (80%) y el Ministerio de Asuntos Exteriores (20%). El primero para financiar programas de cooperación y voluntariado social, el segundo para las ONG de alcance internacional.

"Queremos sensibilizar a la población, especialmente a los católicos, del compromiso que tienen con la Iglesia a través del 0,5%", explicó José Sánchez. "Queremos recordarles que deben poner una cruz", reiteró. Desde este mes y hasta finales de junio los obispos españoles llevarán a cabo una campaña para mejorar "la situación de estancamiento y retroceso porcentual del último ejercicio", comentó Sánchez. La Iglesia hará llegar desde sus parroquias el mensaje "hay que poner una cruz en la casilla de la Iglesia Católica" a sus feligreses. Para ello ha elaborado 44.000 carteles, 1.600.000 dípticos informativos y 450.000 publicaciones de la revista Nuestra Iglesia con más información sobre los datos económicos de las Diócesis. Según Juan José Beltrán, "la campaña sirve para que la gente recuerde a sus agentes, amigos, gestores y a Hacienda dónde quieren poner la cruz". Los obispos piden que se cambie la forma del impreso para dar un lugar más destacado a las casillas.

Según los mismos datos de la Conferencia Episcopal, Barcelona fue durante el ejercicio de 1995 la provincia española con menor porcentaje de contribuyentes en destinar la Asignación Tributaria del 0,5% del IRPF a la Iglesia Católica, con un 37,5%. Le siguen Oviedo y Ceuta. Al otro extremo se encuentra Toledo, por delante de Sevilla, Valladolid y Ciudad Real.