CIU tacha el proyecto de inconstitucional

Los socios del Gobierno se distanciaron ayer de forma muy expresiva. El PNV se expresó a favor de la enmienda alternativa de IU; y CIU aceptó que se tramite la llamada ley del fútbol, pero dejando claro que encuentra al menos dos motivos de inconstitucionalidad en el proyecto. No sólo eso, sino que el portavoz de CIU, Josep López de Lerma, advirtió al Ejecutivo de que su discrepancia no es anecdótica ni de matiz, sino que "es conceptual y, por tanto, susceptible de instalarse en la lejanía si no acertamos en el encuentro de posicionamientos hoy distantes por discrepantes".La sonora advertencia sobre el fondo del problema que lanzó López de Lerma desde la tribuna se concretó en varios extremos: el proyecto, dijo, "tiene una carga intervencionista por parte del Gobierno innegable"; resulta "inconstitucional" el sometimiento que el proyecto pretende al arbitraje del Tribunal de la Competencia; y "no tiene en cuenta el principio jurídico protegido por la Constitución de la no retroactividad de las normas". Todo eso es "demasiado para poder ser digerido" por quien apuesta "por la madurez de la sociedad y por el adelgazamiento del Estado". López de Lerma se mostró de acuerdo en crear un catálogo que determine qué eventos de interés general deben ofrecerse en abierto, pero apostilló: "No acertamos a comprender el porqué, una vez regulado todo esto, el Consejo de Ministros nos propone que, además, aprovechemos el trayecto para ordenar una nueva televisión, que es la denominada digital, mediante un producto final, socialmente sustantivo y económicamente sustancioso, como es la retransmisión de competiciones y acontecimientos deportivos en la modalidad de pago por consumo, arbitrando condiciones, enunciando supuestos, negando inserciones de publicidad...".

¿Por qué entonces la negativa de CIU a las enmiendas a la totalidad? La primera frase de López de Lerma resultó cristalina: "Lo peor que puedes hacerle a un problema importante es discutirlo".