La Calcografía expone las obras del Cuarto Premio Nacional de Grabado

Las obras galardonadas y seleccionadas en el Cuarto Premio Nacional de Grabado se presentaron ayer en las salas de la Calcografía Nacional-Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, de Madrid (Alcalá, 13). Santiago Serrano (1942), Nuria Vidal (1967) y Joan Cruspinera (1945) recibieron el primer premio y los dedicados a un artista novel y a la obra estampada en un solo color, respectivamente. También se ha distinguido al Museo de Bellas Artes de Bilbao por la mejor labor realizada en el estudio y difusión del arte gráfico.Fomentar el arte del grabado y conseguir que existan coleccionistas de artistas contemporáneos son los objetivos de los premios nacionales de grabado, convocados por la Calcografía Nacional y Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y patrocinados por Philip Morris.

Juan Carrete, subdelegado de la Calcografía Nacional y secretario del jurado formado por Miguel Rodríguez-Acosta, presidente, y Estrella,de Diego, Dietrich Mann, Gustavo Torner y José María Vuñuela-, destacó ayer la consolidacion del premio, al que se unen en esta edición "la creatividad y el esfuerzo técnico" de Santiago Serrano; "la enorme fuerza expresiva" del blanco ynegro de. Joan Cruspinera, y "el ejemplo de juventud" de Nuria Vidal.

"Ya se ha perdido el miedo", declaró Juan Carrete. "Los pintores se han enfrentado al grabado de una forma creativa y no como algo complementario a su labor artística. Es uno de los aspectos que reflejan estos premios junto a los nuevos planteamientos técnicos. En los años setenta, el grabado era pura cocina, y se experimentaba sin más. Esa etapa ya se ha pasado y ahora las técnicas se hacen cada vez más sencillas".

Santiago Serrano, premio Nacional de Grabado 1996, ha realizado su obra con aguatinta al aceite de oliva y punteador eléctrico, con tres planchas. La obra, presentada sin título, pertenece a la serie Instrumentos de la pasión, en la que trabaja como pintor. Ayer insistió en su trabajo como pintor y en el tratamiento del grabado como pintura.

"Es un grabado abstracto con cierta geometría. Lo que aparece puede ser una silla o una hache, pero lo importante es que representa una idea", declaró Santiago Serrano. "No se trata de una alegoría o de un símbolo. Hace unos años pinté una serie titulada Ahuecar y encontraba un sentido extraño en esa hache colgada entre la a y la u, como una especie de ejercicio catártico". En la exposición figuran, junto a las obras premiadas de Santiago Serrano -primer premio y dos millones de pesetas-, Nuria Vidal y Joan Cruspinera -medio millón cada uno-, las menciones de honor a Francisco Aguilar, Antonio Cabot, Jorge Galindo, Jafar T. Kaki y Erik Kirksaether. En el montaje se han unido los seleccionados, hasta completar un total de 39 grabados. La muestra viajará por Cáceres, Vitoria, Palma de Mallorca y Andorra.

En otro espacio se presentan publicaciones y catálogos del Museo de Bellas Artes de Bilbao, distinguido por la mejor labor en pro del arte gráfico. Su director, Miguel Zugaza, dijo ayer que el museo, creado en 1914, dedica atención al grabado desde los años treinta, en que adquiere series de Goya, hasta contar' con "una de las colecciones más importantes", con 1.300 estampas.

En sus programas destacan, desde 1981, exposiciones de grabados y la catalogación sistemática de la obra gráfica de artistas contemporáneos. Ya se ha realizado el estudio de la obra completa de Alcaín, Bonifacio, Ramos Uranga, José Hernández, Chillida, Nagel, Ricardo Baroja, Equipo Crónica, Iturrino, Muñoz, Canogar, Hernández Pi joan, Antonio Lorenzo, Rueda, Gordillo, Alexanco y Arroyo.