Sanidad confirma que el brote de neumonía es el mayor de España

El brote de neumonía atribuido a la bacteria denomina res, da legionella, que ha afectado a 249 residentes en Alcalá de Henares, según las cifras oficiales, es el mayor que se ha registrado en España en cuanto a número de casos, según confirmó ayer un portavoz del Ministerio de Sanidad. Este dato también fue ratificado por el director del Centro Nacional de Microbiología de Majadahonda, Carlos Domingo, donde investigan desde hace más de un mes la causa del brote infeccioso.El segundo caso en importancia que se conoce es el de Almuñécar (Granada), ocurrido en 1991, y en el que hubo 62 enfermos, según la Consejería de Sanidad de la Junta de Andalucía.El brote alcalaíno supera en afectados incluso al primero del que se tiene noticia y que dio nombre a la bacteria. Este se originó en la torre de refrigración de un hotel de Estados Unidos donde 4.200 legionarios veteranos celebraban una convención. Enfermaron 221 soldados y murieron 34. La bacteria era una desconocida para los científicos y la causa del brote tardó un año en descubrirse.

Las autoridades sanitarias siguen sin confirmar la localización del foco infeccioso en Alcalá. En el brote de Almuñécar de 1991 determinaron cuál era el foco tras encontrar el mismo tipo de legionella en el acondicionador de aire de un hotel y en las muestras procedentes de siete pacientes, según Manuel de La Rosa, microbiólogo del hospital Virgen de las Nieves, donde fueron atendidos. De la Rosa recuerda que el brote generó "mucha angustia" y que se atajó a las dos semanas. "Pero porque tuvimos mucha suerte y aislamos enseguida la bacteria, que es muy esquiva. Además, al apagar las torres de refrigeración como parte de las medidas preventivas, dio la casualidad de que la causante era una de ellas", explica.Los afectados de Almuñécar, como en Alcalá, no habían coincidido en un sitio cerrado. El acondicionador de aire expulsaba la bacteria al exterior, afectando a los veraneantes que caminaban por el paseo marítimo.

En el centro de salud de Alcalá Reyes Magos, cuartel general de epidemiólogos y expertos, llevan muchos días tratando de atajar el brote. Han adoptado distintas medidas preventivas para dejar a la bacteria sin vehículo de transporte. Además, buscan el foco. O los focos, ya que el director de Prevención y Promoción de la Salud, Felipe Vilas, aseguró que se trataba de un "multifoco".

La oposición del Ayuntamiento complutense (PSOE e IU) ha exigido más información. Ambos grupos quieren saber dónde está el foco, aunque sólo sea presunto, y cuándo podrán reanudar los alcalaínos una vida normal. La legionella vive en el agua, anida en sitios donde el líquido se encuentra estancado y allí alcanza la concentración necesaria para ser peligrosa. Se dispersa cuando este agua se vaporiza y se contagia al inhalar aire.

En Alcalá se han suspendido todas las actividades que suponen vaporizar agua, y se han limpiado los puntos de la red donde había agua estancada, los depósitos y los acondicionadores de aire de la zona afectada. La legionella no tolera el cloro, razón por la que se multiplicó por siete la dosis de este desinfectante en el agua potable. Han pasado más de 12 días (que es el periodo de incubación de esta enfermedad) desde que se adoptaron todas estas medidas. El ministro de Sanidad, José Manuel Romay, se mostró ayer dispuesto a reunirse con la corporación alcalaína.

En Alcalá de Henares (166.925 habitantes), el brote de neumonía provocó el pasado martes un nuevo fallecido, de 88 años. Ya van 12.

Pero también hay buenas noticias: el martes, 11 personas recibieron el alta médica y no se produjo ningún ingreso en el hospital, con lo que el número de pacientes en la cuarta planta del centro descendió de 44 a 33. Dos de ellos están en la unidad de cuidados intensivos.