Chazz Palminteri: "La satisfacción de un actor está en el teatro"

Tiene un físico de armario ropero de dos cuerpos y una deliciosa sonrisa. Fue la sorpresa de ayer en San Sebastián. Chazz Palminteri, el gánster de vena artística de Balas sobre Broadway, por el que estuvo nominado a un Oscar, o el niño que crece con la mafia en Una historia del Bronx, filme que él mismo escribió sobre su infancia y juventud y en el que se reservó un papel de mafioso, presentó en el festival su último proyecto: La brigada del sombrero, una película dirigida por Lee Tamahori que recuerda la historia real de duros policías en Los Angeles en los años 50.Escritor, actor de teatro y próximamente director, Palminteri, todo vestido de negro y con un medio tupé algo anticuado, defendió con uñas y dientes el teatro. "Como actor, la satisfacción está sin duda en el teatro. Adoro el cine pero la apuesta hay que hacerla por el teatro. El cine es lo que me da dinero, pero como perspectiva artística prefiero el teatro".

Palminteri habló con la prensa de lo que él considera cine de verdad. "En Hollywood hay demasiadas películas que parecen parques de atracciones. A mí no me disgustan los efectos especiales, pero son como la comida china. Comes y te llenas, pero luego no queda nada.".